N.º 84 • Julio - Diciembre 2021
ISSN: 1012-9790 • e-ISSN: 2215-4744
DOI: https://dx.doi.org/10.15359/rh.84.18
Licencia: CC BY NC SA 4.0

Sección Balances y Perspectivas

Negocios y servicios en la Ciudad de México a finales del siglo XIX. Análisis espacial y re-clasificación: el directorio de comercio de Figueroa Doménech y los criterios del Sistema de Clasificación Industrial de América del Norte

Business and Services in Mexico City, at the End of Nineteenth Century. Spatial Analysis and Re-Classification: The Figueroa Doménech Trade Directory and the North American Industry Classification System Criteria

Negócios e serviços na Cidade do México no final do século XIX. Análise espacial e reclassificação: o diretório comercial Figueroa Doménech e os critérios do Sistema de Classificação Industrial da América do Norte

Tania Chávez*
María Dolores Lorenzo
**
Leonor Ludlow***

Resumen: El directorio comercial de la Ciudad de México, publicado por el español Jerónimo Figueroa Doménech en su Guía general descriptiva… (1899) es la base documental que sustenta este artículo, que presenta una homologación de los registros comerciales de finales del siglo XIX con el Sistema de Clasificación Industrial de América del Norte (SCIAN). Asimismo, representamos los registros del comercio de finales del siglo XIX en un plano histórico de la Ciudad de México. Con esto, buscamos integrar la perspectiva histórica a un marco único, consistente, actualizado y útil para la recopilación, el análisis y la presentación de estadísticas de tipo económico. El artículo es un punto de partida para estudiar en la larga duración periodos de expansión y retroceso de las transformaciones de la estructura del comercio en México.

Palabras claves: Ciudad de México; Directorio comercial; estructura ocupacional; guías de forasteros; Sistema de Clasificación Industrial de América del Norte (SCIAN); historia.

Abstract: By examining the business guide published by Jerónimo Figueroa Doménech in his Guía general descriptiva... (1899), our aim is to show a classification approach of Mexico City economic activities. Using the North American Industrial Classification System as a reference, which for 20 years has been applied to analyze the development of economic activities in Mexico, USA and Canada, we are able to explore the distribution of business and urban services areas at the end of nineteenth century as a starting point to study this changes with an historical perspective (longue durée).

Keywords: Mexico city; Business guide books; occupational structure; North American Industry Classification System (NAICS); history.

Resumo: O anuário comercial da Cidade do México, publicado pelo espanhol Jerónimo Figueroa Doménech em seu Guia geral descriptiva… (1899) é a base documental que sustenta este artigo, que apresenta uma homologação dos registros comerciais do final do século XIX com o Sistema de Classificação Industrial da América do Norte (NAICS). Também representamos registros comerciais do final do século XIX em um mapa histórico da Cidade do México. Com isso, buscamos integrar a perspectiva histórica em um quadro único, consistente, atualizado e útil para a coleta, análise e apresentação de estatísticas econômicas. O artigo é um ponto de partida para estudar os longos períodos de expansão e regressão das transformações da estrutura comercial no México.

Palavras chaves: Cidade do México; Diretório de negócios; estrutura ocupacional; guias forasteiros; Sistema de Classificação Industrial da América do Norte (NAICS); história.

Introducción

Los directorios y guías comerciales son una fuente vasta de nombres y direcciones de personas: empresarios, comerciantes y profesionistas y su ubicación en las ciudades. En la actualidad son utilizados como fuente histórica para recuperar datos precisos de diversos actores económicos y políticos.

En este artículo exploraremos los datos de la Guía general descriptiva de la República Mexicana, historia, geografía, estadísticas, etc., del publicista gallego, Jerónimo Figueroa Doménech editada en 1899.1 La guía es un texto conocido y utilizado como fuente de referencias de personas y lugares en la República Mexicana. Sin embargo, su lectura, a la luz de los sistemas de información georreferencial y de los nuevos sistemas de clasificación del comercio y la industria, renuevan el uso de esta guía en el campo de la historia, pues brinda otras posibilidades de análisis para estudiar el desarrollo de la estructura productiva urbana desde la actualidad.

Nuestra propuesta se desprende de los primeros resultados obtenidos de una pesquisa de largo aliento sobre el comercio español en México a fines del siglo XIX, que hemos venido estudiando desde 2014 y más recientemente hemos retomado su análisis, con el apoyo de la Dirección General de Asuntos de Personal Académico de la UNAM.2 La estrategia de investigación inició con el levantamiento de un registro muestra del sector mercantil de la Ciudad de México, a partir de la información del directorio comercial ubicado en el primer tomo de la Guía general descriptiva de la República Mexicana de Figueroa Doménech. Una vez verificada esta información en una base de datos, que contiene la razón social, el ramo comercial, la dirección y las referencias para su ubicación, seguimos con el proceso de georreferenciar los datos en un plano histórico de la Ciudad de México.3 Por último, homologamos los registros comerciales asentados en el directorio a los criterios clasificatorios actuales sobre actividades económicas, y para ello consideramos el Sistema de Clasificación Industrial de América del Norte (SCIAN), el cual ha sido desarrollado e implementado por Canadá, EE. UU. y México con el propósito de buscar bases comunes para comparar los avances y retrocesos de los países en materia comercial.4

Resignificar el uso de los directorios y los datos comerciales supuso, por un lado, colocar a disposición de los investigadores nuevos «bancos de información» y, por otro lado, destacar la tarea de tender diálogos con la información que se genera hoy en día. En las siguientes páginas, como aportaciones de nuestra investigación, perfilamos la importancia de darle historicidad al uso de la información comercial, de la estructura socioeconómica y de la diversidad de representaciones que pueden construirse con fuentes que nos vienen del pasado. Si bien los censos y los padrones han sido documentos primordiales para el análisis de la dinámica socioespacial de las ciudades; en este artículo, planteamos que los directorios y las guías de comerciantes son una mirada complementaria sobre la ciudad y también pueden emplearse para reconstruir representaciones de la estructura socioeconómica en el espacio urbano y en la perspectiva histórica.5

Publicidad y expansión comercial: guías y directorios

A lo largo del siglo XIX las guías de viajeros y los directorios comerciales e industriales fueron un medio de propaganda para profesionistas, negociantes de diversa naturaleza, autoridades militares y religiosas que residieron en las ciudades. La tarea informativa de las guías y directorios de comerciantes coincidió con una etapa prolífica de publicación especializada sobre temas económicos, tanto en la prensa como en revistas e impresos populares. Estas publicaciones se convirtieron en una fuente informativa de gran utilidad para propios y extraños. En cuanto al comercio y los servicios, estas guías fueron un instrumento que ayudó a transitar hacia las formas modernas de la expansión económica, caracterizada por cambios estructurales en la industrialización, el aumento de mano de obra asalariada, la expansión de las ciudades y el crecimiento demográfico, además de las migraciones internas.6

Las guías están dotadas de una abundante información destinada a estimular las inversiones y, por ello, pueden sumarse a las descripciones o a los estudios de los viajeros que, desde principios de siglo XIX, fueron escritos por encargo de comerciantes y banqueros europeos con el propósito de dar a conocer en sus países las riquezas naturales de las nuevas naciones hispanoamericanas. Algunas descripciones publicadas en las guías de comerciantes fueron escritas por cronistas y por prominentes científicos que exponían la historia, la geografía o las formas de organización administrativa de los territorios que recorrían. La especialización de los contenidos, a veces, incluía también información arancelaria destinada a los importadores, posiblemente con el fin de animarlos a participar en el comercio local, o bien como una novedosa forma de comunicar los avances alcanzados en estos países. Estas referencias que hoy en día son tan útiles para los historiadores fueron, en su momento, destinadas a los habitantes de las ciudades en general, pero fundamentalmente estuvieron dirigidas al extranjero, bien como diarios que orientaban a los viajeros en sus recorridos en territorios desconocidos o para dar a conocer algunos aspectos de la legislación mercantil y de los requisitos aduanales, pues importaba dar cuenta de las riquezas naturales y de las condiciones de «paz y progreso» que prevalecían en el México del porfiriato.

Las guías de forasteros escritas por eruditos, sobre todo, durante la primera mitad del siglo XIX, expusieron estudios sobre la geografía y las disposiciones normativas para los viajantes en la Ciudad de México, pues consideraban que la publicación de mapas, los datos demográficos y las curiosidades de las regiones eran necesarios para que el «ajeno» pudiera «moverse en un territorio inédito».7 Frente a estas publicaciones los directorios comerciales visibilizaron el mundo mercantil y los servicios en las ciudades para promover la expansión de los mercados; daban una idea de cómo funcionaban las urbes internamente y mostraban de qué manera las ciudades se conectaban con regiones fronterizas y mercados trasatlánticos.

Otras publicaciones que tuvieron el propósito de coadyuvar a las personas en sus actividades económicas fueron los calendarios mercantiles. Estos impresos populares brindaron información cotidiana, práctica y accesible para la operación del negocio día a día. De tal manera, anunciaban los horarios de los ferrocarriles, los días de recepción de correspondencia en las oficinas de correos o las disposiciones relativas al timbre fiscal, entre otras órdenes, que podían cambiar de un año a otro.8 Frente a estas publicaciones anuales, los directorios comerciales brindaron información relativa a la ubicación de oficinas públicas, templos y establecimientos del sector mercantil e industrial. La información tuvo un carácter menos efímero, que no exigía la revisión anual de sus contenidos y, más bien, los datos que divulgaban estaban relacionados con la localización de espacios comerciales cuyo aporte era facilitar el contacto directo entre comerciantes, industriales y los servicios urbanos indispensables para hacer funcionar un negocio.

En sus páginas, las guías comerciales incluyeron directorios de los funcionarios de los gobiernos, centrales y locales; además, brindaron un recuento de los servicios públicos y profesionales que había en las ciudades, con lo cual se mostraba el grado de especialización de las actividades socioeconómicas. Con base en la información que producía la administración local, las guías recopilaron la ubicación de las oficinas públicas, los servicios de transporte y los establecimientos de salud y educación, así como la localización de los espacios de entretenimiento, los templos e iglesias, entre otros servicios urbanos. La relación pormenorizada de los comercios y la industria, organizada por secciones y presentada en orden alfabético, sirvió como propaganda comercial de los negocios que daban a conocer su ubicación exacta y se exhibían, en esta representación mercantil de la urbe, como piezas del engranaje de la productividad de un mercado en expansión.

En suma, la prioridad de las guías y directorios comerciales fue brindar a sus lectores información útil para involucrarse y establecer relaciones en los mercados locales o nacionales: tal como lo expuso J. Figueroa Doménech, el editor de una de las guías más completas de finales del siglo XIX, el objeto de la publicación de su obra fue «llevar a las naciones del Viejo Mundo, donde hay plétora de capitales ansiosos de hallar campos de explotación, el convencimiento de que México les ofrece, con sus valiosos territorios, el más amplio y fecundo que pudieran desear». Además, señaló que la tendencia en su libro era «relacionar el comercio de la capital con el de los Estados».9

El directorio, los editores y su contexto

Las guías comerciales debían dirigirse a los diferentes públicos del mundo mercantil. Como un escaparate impreso del comercio en la ciudad, la jerarquización de sus contenidos respondió a las necesidades del público inversionista y a los intereses prácticos de los grupos económicos inmersos en la expansión de un negocio, además de brindar información precisa y puntual para aquellos que buscaban el punto de venta de un producto en la ciudad.10 Desde la perspectiva del anunciante, los directorios eran un asomo para los pequeños comerciantes al mundo de los negocios y también para los empresarios más notables que podían exhibir en estas guías el posicionamiento de su negocio, a través de artículos descriptivos de la trayectoria comercial de sus firmas, en cuyas páginas exhibían estereofónicamente el éxito y el liderazgo que habían forjado en ciertos ramos de la industria o el comercio.

Editores e impresores fueron especializándose en este tipo de publicaciones necesarias para participar del auge comercial que ofreció el proceso de expansión económica en las últimas décadas del siglo XIX. Y para compilar y organizar esta información se necesitaron cabezas que idearan y encargaran la convocatoria a los posibles interesados en inscribirse en el directorio. Los gobiernos contribuían con información, y quizá, con algunos recursos, pero los comerciantes eran, principalmente, quienes financiaban las guías con las cuotas que los editores cobraban a los anunciantes por aparecer en sus páginas. De esta manera, el acopio y la composición de las guías dependió en gran medida de las relaciones que los editores podían establecer con los comerciantes, empresarios y profesionistas de las ciudades.

Los editores de la Guía general descriptiva de la República Mexicana, historia, geografía, estadísticas, etc., idearon la manera de ordenar los nombres de las personas, los ramos del comercio y las actividades políticas y económicas. Ellos esgrimieron el canon de lectura en dos grandes tomos; en el primero, registraron los datos correspondientes a la Ciudad de México, y en el segundo, plasmaron las diversas actividades económicas en las entidades federativas fuera del Distrito Federal. Dispusieron la organización por estados y, cada apartado, inició con una somera presentación del medio físico y de su clase política, acompañada por listas de nombres y direcciones de profesionistas, comerciantes, manufactureros y numerosos oficios y servicios, además de hacendados.

El primer tomo de esta guía ofrece más de 10 000 registros; y en sus páginas están anotados los nombres y los cargos de la alta burocracia, de los jerarcas de la Iglesia, están también las referencias de los periodistas y los escritores, además de un directorio domiciliario y del «Directorio Industrial, profesional y de comercio», cuyos registros están clasificados, de manera alfabética, en distintas categorías, entre las que se incluyen la fabricación de productos, los expendios de venta al por mayor y al por menor, además de los servicios y las profesiones que se ejercían en la Ciudad de México. El segundo tomo, dedicado a los estados de la República, según el dato de Figueroa Doménech, registró 25 175 personas, «con el lugar de residencia y su profesión».

La recopilación, ordenamiento y publicación de noticias, reglamentos, direcciones y reseñas las llevaron a cabo Jerónimo Figueroa Doménech y Ramón Araluce. Estos dos notables editores españoles fungieron como autor-compilador y editor. El primero, Jerónimo Figueroa Doménech era de origen gallego, y Araluce nació en Santander en 1865. Ramón Araluce llegó muy joven a México, al iniciar los años ochenta, y fue acogido en el seno de un influyente grupo de españoles radicados en México, que lo encaminaron al sector editorial, y, en particular, en la firma del asturiano De la Fuente y Parres,11 que fue un empresario editorial destacado, difusor de varios estudios históricos escritos por hispanos y muy vinculado al selecto grupo del Casino Español y de la Beneficencia Española. En la empresa editorial escaló diversos escaños hasta adquirir la firma en 1900, tras el retorno de su antiguo propietario a Barcelona, lugar de residencia de su nueva esposa, donde estableció la firma nuevamente, y más tarde, fue designado presidente la Cámara de Comercio Mexicana en España; se dice que esto le permitió salir bien librado de la guerra civil, junto con su familia y empresa.

Hay menos información disponible sobre Jerónimo Figueroa Doménech, originario de Corcubión, donde laboró en el ramo editorial y periodístico junto con el también gallego Antonio Porrúa Marchou, casado con una hermana de Figueroa Doménech. Ambos emigraron y tras una corta estancia en Madrid y La Habana, al llegar a México, se dirigieron hacia la capital mexicana donde fundaron una emblemática librería.12 A su regreso a España en 1921 continuó con las tareas periodísticas en diversos órganos de prensa editados en Galicia y en el Globo de Madrid. Durante su estancia en México escribió la guía citada, además de otros testimonios sobre sus vivencias, durante la etapa de la lucha armada, que llevan el título: La revolución y sus héroes. Crónica de los sucesos políticos ocurridos en México desde octubre de 1910 a mayo de 1911. Veinte meses de anarquía.13 Crónica de los sucesos políticos ocurridos en México desde julio de 1911 a febrero de 1913: el interregno político, la administración maderista. D. Félix Díaz y la decena trágica, ambos libros publicados en la firma editorial Herrero hermanos, fundada en 1890 y especializada en la venta de publicaciones religiosas.14

La nacionalidad española de los editores fue sin duda un elemento esencial para estrechar relaciones con los sectores productivos del país y recopilar los datos de las personas dedicadas a la industria, el comercio y los servicios. De acuerdo con el conocimiento que se tiene sobre el comercio español en el periodo, la actividad mercantil de la Ciudad de México estuvo dominada por el peso de los hispanos.15 En el caso de la Ciudad de México y su área circunvecina el 49 % del tráfico comercial era realizado por españoles.16 Este grupo de inmigrantes destacó en el comercio de productos de importación, principalmente de bienes alimenticios. Su presencia en el comercio mediano y al por mayor se distinguió en un mercado compuesto por un vasto universo de comercio informal, que se ubicaba en las calles y en los tendejones o estanquillos, que ofrecían productos agrarios o pequeños utensilios o alimentos manufacturados caseramente. A diferencia de estos pequeños comercios de autoempleo y de subsistencia, que no pudieron cubrir la cuota para ingresar en la guía de Figueroa, los negocios de los españoles establecidos en la Ciudad de México consiguieron ocupar un lugar en el directorio comercial que publicaron los editores españoles Figueroa y Araluce.

Cabe destacar que en esta época la importación de productos españoles aumentó, quizás debido al incremento del nivel de consumo de esta colonia, ubicada, en su gran mayoría, entre los sectores medios y altos de la sociedad mexicana; quizá también aumentó por la demanda de productos alimenticios que generó la expansión demográfica en la Ciudad de México. Entre 1842 y 1882, la población en esta ciudad pasó de 115 000 a 193 000 habitantes, duplicándose hacia las primeras décadas del siglo XX. El número de españoles inmigrantes en México también creció al pasar de poco más de 13 000 habitantes en 1895, a 29 500 españoles en 1910, aproximadamente, según estimó Clara E. Lida.17

Barcelona, Cádiz, Santander, Vigo y la Coruña fueron los principales puertos desde donde se remitieron diversos alimentos y bebidas: frutas secas, aceite, vinos, aguardiente y sidra; provenientes de estos puertos también se importaban conservas de carne y pescado, papel para cigarros, libros, armas de fuego y encajes de algodón y lino. El incremento de estas importaciones también se ha explicado a partir del inicio de una fase de expansión de la economía española y, a una nueva dirección de envíos, que anteriormente se destinaban a Puerto Rico y Cuba.18

Lo cierto es que el comercio de españoles en la Ciudad de México ocupó un rango especial; desde 1890 se reconocía la existencia de «un comercio particular» monopolizado por los inmigrantes españoles. Este consistía en las tiendas de abarrotes, situadas, generalmente, en la esquina de las calles, en las cuales se vendía alimento en conservas, vinos, tabaco, y todo tipo de harinas y granos, además de pan e incluso eran pequeñas agencias de préstamos, que fiaban a los parroquianos, por prendas o mercancías.19 De tal suerte, este grupo además de la compraventa de productos agrícolas y manufacturados ofreció en sus tiendas alimentos y bienes importados de la península, sobre todo, vino, uvas, y conservas. De esta manera, los españoles fueron destacados comerciantes que cubrieron la demanda de los habitantes de la ciudad que bien podían ser los propios inmigrantes o los mexicanos de los grupos medios y altos.

A partir de estos antecedentes, sustentamos la existencia de una red de relaciones comerciales consolidada en la Ciudad de México, en la cual los inmigrantes españoles se integraron y adquirieron un papel central, no solo en la cuantía de sus inversiones, sino a través de su ubicación en el espacio urbano; la cual fue registrada, aunque no de manera específica, por nacionalidad, en el directorio comercial de la guía que publicó Figueroa Doménech. Sabemos que los negocios de españoles se aglutinaron en las áreas más prósperas de la ciudad y para escenificarlo, eventualmente, utilizaremos la base de datos de Figueroa Doménech para representar la presencia española en el comercio. No obstante, para concretar esta representación espacial, es necesario ampliar la información que tenemos hasta el momento, por ejemplo, con los padrones de la municipalidad de la época que han registrado a los inmigrantes y sus actividades económicas.20 Por ahora, valga señalar la posible red de paisanaje entre los editores españoles de esta guía comercial y un boyante grupo de inmigrantes hispanos dedicados al comercio en la Ciudad de México, que muy probablemente fueron registrados en las páginas del directorio que nos ocupa.

La georreferenciación y la reclasificación

En este artículo, nos centramos en la información de 5 41721 registros asentados en una base de datos que contiene, como señalamos anteriormente, el nombre o razón social, la dirección y el ramo comercial dados por el directorio. De acuerdo con los criterios empleados, ubicamos más de 250 giros o ramos de la industria, los servicios y el comercio en la Ciudad de México. La sistematización de estos registros en la base de datos nos permitió recuperar cada registro en una escala micro histórica; asimismo, en atención a la asociación por el tipo o giro del negocio reportado en el directorio, pudimos ubicar y relacionar las actividades económicas, según el agrupamiento en ramos del comercio y la industria en la Ciudad de México, a finales del siglo XIX. No obstante, la amplitud de giros comerciales (250) limita el análisis exploratorio general, de carácter comercial y de servicios. Por eso, nos dimos a la tarea de reclasificar estos grupos a partir de las definiciones que dicta el Sistema de Clasificación Industrial de América del Norte (SCIAN), y que el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI) utiliza para realizar el proceso de codificación de la actividad económica en México, EE. UU. y Canadá (Véase anexo, Tabla 4).22 Posteriormente, la respectiva georreferenciación nos permitió ubicar en el nivel de manzana, en el Plano General de Indicación de la Ciudad de México de 1886, los registros comerciales de finales del siglo XIX –véase anexo, mapa 1–.23

El objetivo del SCIAN en México es proporcionar un marco único, consistente y actualizado para la recopilación, análisis y presentación de estadísticas de tipo económico, que refleje la estructura de la economía mexicana. El SCIAN-México es la base para la generación, presentación y difusión de todas las estadísticas económicas del INEGI. Su adopción, por parte de las Unidades del Estado, permite homologar la información económica que se produce en el país.24 La conformación de la estructura del SCIAN se define en sectores,25 subsectores,26 ramas,27 subramas y clases.28 La especificación de cada uno de los criterios que componen el SCIAN nos permitió homologar la información económica que obtuvimos del directorio comercial de Figueroa Doménech.

El aporte más contundente para la reclasificación de los registros comerciales de 1899 lo obtuvimos de la definición de actividad económica, entendida como el conjunto de acciones realizadas por una unidad económica con el propósito de producir o proporcionar bienes y servicios que se intercambian por dinero u otros bienes o servicios.29 Esta descripción considera al sujeto –unidad económica– que realiza la actividad; es decir, no concibe a la actividad en abstracto.30 Asimismo, el significado integra en la unidad económica, el lugar o entidad donde se realizan las actividades, con lo cual pudimos ubicar las fábricas, despachos, bancos, casas de cambio, escuelas, hospitales, talleres, empresa de transporte, oficinas de gobierno y otros establecimientos mencionados por Figueroa Doménech en el registro comercial.

En el mapa 2 y en la tabla 3 de los anexos se muestra la distribución espacial de las Unidades Económicas que producen o proporcionan algún tipo de bien o servicio en la ciudad. Estas representaciones permiten reconocer que el cuartel con el mayor número de establecimientos comerciales registrados es el número IV –1893 establecimientos–, seguido de los cuarteles III y II –970 y 859 establecimientos, respectivamente–. La ciudad muestra una aglomeración de actividad comercial y de servicios en la zona centro, como era de esperarse, con una densidad muy alta en las manzanas circundantes al centro de la ciudad –véase los datos específicos en el anexo, mapa 2, tabla 3–.

Obtuvimos de la homologación de los registros del directorio la identificación de 17 rubros –sectores– en el SCIAN. Si bien este sistema maneja 20 sectores en la Ciudad de México, para el año que registra el directorio (1899) solo se reportaron establecimientos en 17 sectores –véase anexo, tabla 2–.31 Respecto de los tres sectores sin información señalamos que, en primer lugar, los registros del directorio del siglo XIX no consideraron «corporativos», y aunque se menciona la existencia de asociaciones comerciales de diversa índole, estas no fueron ubicadas para la homologación como corporativos; el segundo sector sin información es el denominado «Servicios de apoyo a los negocios y manejo de residuos, y servicios de remediación», que no tienen referentes para finales del siglo XIX. Por último, dado que el directorio comercial tiene un carácter «privado», en esta sección no se ubicaron las «actividades legislativas, gubernamentales, de impartición de justicia y de organismos internacionales y extraterritoriales», las cuales podrían incorporarse en futuras investigaciones puesto que, en otras secciones de la Guía general descriptiva se registraron estos datos. Del análisis por sector, en la representación proporcional del comercio, a finales del siglo XIX, corroboramos que los tres sectores que agrupan el mayor número de registros son los relacionados con el comercio al por menor –29 % del total de registros–, otros servicios, excepto actividades gubernamentales –13 %– y las industrias manufactureras, con un 12 % del total de registros –véase anexo, gráfico 1.

Esperamos que la homologación de los grupos planteados por Figueroa, con su equivalente en sectores, subsectores y ramas, manejados por el SCIAN se convierta en una aportación para otras investigaciones en las que se compare la actividad económica de la ciudad en perspectiva histórica. Nuestra expectativa, en este trabajo, es aún acotada, pero puede ser germinal en las pesquisas de larga duración que se propongan identificar y definir las actividades económicas de manera única.

Ajustes y resultados

El directorio del siglo XIX no definió los criterios de agrupación de las actividades económicas. De tal manera, en algunos casos, enfrentamos dilemas para ubicar en un solo sector a quienes realizaban diversos tipos de actividades económicas. En general, Figueroa Doménech diferenció entre los dedicados a la venta al por menor y los que comerciaban al mayoreo. Sin embargo, esta diferencia no fue un criterio claro para definir, por ejemplo, a los productores de ciertos bienes o a los artesanos que confeccionaban y vendían en el mismo lugar sus productos. En el caso de las sombrererías que fueron registradas como «fábricas y expendios de sombreros», vemos como este grupo de productores-comerciantes anunció en el directorio su doble actividad: se presentaron como vendedores y fabricantes mayoristas distinguiéndose de los «expendios de sombreros al por menor» que no producían estas piezas de vestir. Para fines de la homologación en el SCIAN estos fueron ubicados en el sector de comerciantes al por mayor, pues ceñirlos al sector de manufacturas nos pareció que no recogía el sentido de productor-comerciante.32Con todo, sirvan estas precisiones metodológicas para considerarlas en otros casos de homologaciones en las que puedan repetirse estas imprecisiones.

Otro aspecto que vale la pena señalar sobre el registro de manufacturas en el directorio son los talleres artesanales que elaboraron productos y oficios que irían cayendo en desuso a lo largo del siglo XX. Por ejemplo, las doradurías, los torneros de huesos de marfil o los toneleros registrados por Figueroa Doménech son de difícil homologación con los criterios del SCIAN. No obstante, fueron integradas en «otras industrias manufactureras», para mantener el registro histórico e identificar la alta especialización de los oficios a finales del siglo XIX, así como las actividades que se fueron extinguiendo.

Para los fines de este proyecto y dada la importancia cuantitativa de los registros vinculados a los servicios y agencias de comercio y finanzas nos parece pertinente aclarar que el SCIAN integra el rubro de los comisionistas y corredores como comerciantes minoristas y los define como aquellos que venden o «promueven» la compraventa a cambio de una comisión o pago y son conocidos como agentes de ventas, corredores de mercancías, comisionistas, consignatarios, intermediarios del comercio al por menor, agentes importadores y exportadores. Sin embargo, a finales del siglo XIX, según la definición del Código de Comercio de 1889, los comisionistas brindaban servicios al comercio, y eran personas que recibían «mandato aplicado a actos concretos de comercio», lo cual requería del otorgamiento de un poder constituido en escritura pública. Los comisionistas podían ayudarse de los «corredores»33, que fungían como agentes auxiliares del comercio y cuya intervención tenía el objeto de ajustar y otorgar contratos mercantiles. Según el artículo 12 del código de 1889, los corredores no podían ejercer el comercio y para realizar sus servicios requerían una licencia que expedía el Ministerio de Fomento. Por todo lo anterior, consideramos que la homologación de comisionistas y corredores se apegaba de manera más precisa, por su práctica definida en el Código de Comercio 1889, al rubro de Servicios financieros definidos por el SCIAN como intermediarios que requieren de autorización para operar con activos –dinero y bienes–, de los que obtiene beneficios sin convertirse en propietario de estos y decidimos no agruparlos en el sector de comercio como lo estipularía el SCIAN.

La última precisión respecto de nuestros resultados es recordar que en este artículo presentamos el registro de las unidades asentadas en el directorio de Figueroa Doménech, lo cual no corresponde con los registros de individuos dedicados a diversas actividades comerciales en padrones o censos. De manera alternativa a la información de censos y padrones, la relación de negocios que ofrece este directorio posibilita el reconocimiento de las redes y los grupos de comerciantes vinculados por el ramo al que pertenecen, por el número de sucursales o bien por los múltiples negocios que gestiona un solo individuo; así también se pueden reconocer las relaciones de ciertas familias que tienen una presencia significativa en algunos servicios y en ciertos ramos comerciales. Sin embargo, para este análisis microsocial sería necesario la consulta de otras fuentes, por ejemplo, el padrón de la municipalidad de 1882 de la Ciudad de México. Por lo pronto mostraremos un ejemplo de la posibilidad que brinda la base de datos, que debido a su extensión no fue incluida en el anexo.34

Ubicamos a la familia «Abascal» como un grupo de comerciantes establecido en la Ciudad de México, a partir de las razones sociales registradas en la base de datos y después revisamos las referencias de esta familia en el padrón de la municipalidad de 1882. Los Abascal eran Manuel y su esposa, de apellido Sotres; ambos fueron registrados en el padrón como inmigrantes de origen español. Además, en el padrón asentaron que habitaban en una casa en el cuartel III, con seis jóvenes, posiblemente los hijos o los sobrinos, de nombre Saturnino, Manuel y José, también de apellido Abascal y tres hijas. En el directorio comercial encontramos la actividad de este grupo de familia de inmigrantes españoles asentados en la Ciudad de México. Bajo el registro de «Saturnino Abascal» y «Abascal y Sotres» localizamos dos comercios de abarrotes en las calles de Bucareli y Estampa de San Juan, respectivamente.35 Todo lo cual indica, que si bien en el registro del padrón de 1882 Saturnino era un joven que vivía en la casa familiar, al cabo de quince años, este tenía un negocio de abarrotes, registrado por Figueroa en el directorio comercial. Corroboramos así la presencia y la expansión de este grupo familiar de abarroteros españoles en la Ciudad de México.

Otro grupo familiar con una presencia notable en el comercio de finales del siglo XIX fueron los Chriestlieb y Rubke. A ellos los ubicamos en la 2.ª calle de Monterilla, número 9. Bajo la misma razón social registraron siete negocios: una agencia para comprar seguros, la venta de seguros marítimos, una empresa de transportes marítimos, un despacho de compra venta de cigarros y puros, otra de vinos, además de ofrecer el servicio de comisionistas. Los Chriestlieb y Rubke son uno de los tres registros que encontramos en el directorio como mayoristas de puros y cigarros, lo cual advierte, por el tipo de negocios, que su consorcio manejó no solo la venta sino la introducción e importación de cigarros, puros y vinos a México.

Consideraciones finales

En este texto dejamos al descubierto una propuesta de sistematización de los datos históricos sobre el comercio en la Ciudad de México, los cuales consideramos pueden brindar la posibilidad de ir construyendo información que ofrezca vías para la comparación de las actividades económicas en la larga duración, además del análisis microsocial del comercio y su expansión en esta ciudad. Nos valimos, para ello, de tres recursos: la transcripción y ordenamiento de la información comercial en la Guía general descriptiva de Figueroa Doménech, la georreferenciación de los registros en el plano de la Ciudad de México de 1886 y la homologación de estos datos con los criterios del SCIAN que se presenta, a modo de cuadro, como anexo de este artículo. No obstante, el estudio específico de los grupos de inmigrantes y de las redes de comerciantes en sectores será materia de otras investigaciones.

Sabemos que los historiadores se encuentran hoy ante nuevos y grandes retos de estudio. A las virtudes de la narrativa y de la erudición tan relevantes en la reconstrucción histórica se suma, ahora, la posibilidad de allegarse de una rica y novedosa información, que brindan, hoy en día, las numerosas páginas electrónicas que han abierto fuentes primarias –manuscritos e impresos– a un amplio público. En este escrito, expusimos una mirada a las grandes posibilidades que ofrece, por un lado, la digitalización de documentos de gran envergadura como lo es el directorio comercial, y por otro, mostramos las posibilidades de las herramientas y técnicas que acercan al historiador con la sistematización de datos, a través de diversos programas –software– como es el caso del estudio de las redes, tan útiles para biólogos y antropólogos, o bien, la georreferenciación para el trabajo de los urbanistas, geógrafos o arquitectos e ingenieros. Esta última herramienta que hemos empleado en nuestra investigación forma parte de los nuevos caminos de la investigación, y esperamos que la metodología y el análisis presentado en este artículo sea útil para nuestros colegas actuales y futuros.

Anexos

El Directorio industrial, profesional y de comercio de Figueroa Doménech incluye un total de 5417 registros, de los cuales en este estudio se consideraron un total de 5185, que contienen toda la información necesaria para ser ubicados en el territorio –dirección que incluye calle y número–. Los 232 restantes no tienen información suficiente para ser ubicados. Los registros –puntos– fueron ubicados en el Plano general de la Ciudad de México, 1886, el cuál fue georreferenciado y sobre él fueron digitalizadas las manzanas que se numeraron al interior de cada cuartel para apoyar en la referencia y ubicación de los registros –mapa 1–.

Mapa 1. Ubicación de registros en la Ciudad de México, 1899

Fuente: Elaboración propia, con base en el «Plano general de indicaciones de la Ciudad de México» y el directorio comercial para la Ciudad de México publicado por Jerónimo Figueroa Doménech. Guía general descriptiva.

Para un análisis más detallado de la distribución que tienen las Unidades comerciales al interior de la ciudad se georreferenció cada uno de los registros con un punto en la manzana correspondiente a la dirección registrada en el directorio. Las manzanas, a su vez, se agruparon en el plano, en ocho cuarteles. La extensión de los cuarteles y el número de manzanas que agrupó cada cuartel se muestra en la tabla 1.

Tabla 1. La Ciudad de México en 1899: manzana urbana y su conformación interna por cuarteles I-VIII

Aspecto

Cuartel

Total, general

I

II

III

IV

V

VI

VII

VIII

Extensión aproximada del cuartel (hectáreas)

114

342

164

139

149

159

277

846

2189

Número de manzanas digitalizadas

52

100

75

71

81

55

86

25

545

Tamaño promedio de la manzana (hectáreas)

0,46

0,29

0,46

0,51

0,54

0,35

0,31

0,03

0,25

Número de registros

326

859

970

1893

373

497

195

72

5185

Promedio de registros por manzana

8

10

15

29

6

10

4

5

12

Número de manzanas ocupadas con al menos un registro comercial o de servicios

41

87

65

66

60

49

51

15

434

% de manzanas ocupadas

78,9

87,0

86,7

93,0

74,1

89,1

59,3

60,0

79,6

Fuente: Elaboración propia, con base en el «Plano general de indicaciones de la Ciudad de México» y el directorio comercial para la Ciudad de México publicado por Jerónimo Figueroa Doménech. Guía general descriptiva.

El total de manzanas digitalizadas en el plano es de 545, de las cuales cerca del 80 % de ellas tienen por lo menos un registro referido en el Directorio de Figueroa Doménech. El promedio de registros por manzana en la ciudad es de 12 puntos, destacan en este registro las manzanas agrupadas en el cuartel IV, el cual tiene una densidad de registros mayor con un promedio de 29 unidades económicas por manzana ocupada.

Una vez ubicados todos los puntos en la ciudad, se procedió a estandarizar la base de datos y a clasificar cada uno de los registros respecto a los criterios que considera el SCIAN para agrupar cada unidad económica en los distintos sectores, subsectores y ramas de actividad.

Los registros considerados –susceptibles a ser ubicados– en la ciudad fueron clasificados en 17 sectores de los 20 que considera el SCIAN, dado que en 3 sectores no se encontraron unidades económicas que pudieran ser incluidas en ellos. En la Tabla 2 se muestra la distribución de registros en los 17 sectores, en los que se agruparon el total de registros contenidos en el directorio.

Tabla 2. Clasificación de registros de la actividad económica de la Ciudad de México, 1899 según el SCIAN

Sector

Descripción

Núm. de registros

%

11

Agricultura, cría y explotación de animales, aprovechamiento forestal, pesca y caza

15

0,3

21

Minería

26

0,5

22

Generación, transmisión, distribución y comercialización de energía eléctrica, suministro de agua y de gas natural por ductos al consumidor final

13

0,3

23

Construcción

348

6,7

31-33

Industrias manufactureras

624

12,0

43

Comercio al por mayor

74

1,4

46

Comercio al por menor

1 528

29,5

48-49

Transportes, correos y almacenamiento

51

1,0

51

Información en medios masivos

165

3,2

52

Servicios financieros y de seguros

415

8,0

53

Servicios inmobiliarios y de alquiler de bienes muebles e intangibles

41

0,8

54

Servicios profesionales, científicos y técnicos

516

10,0

61

Servicios educativos

3

0,1

62

Servicios de salud y de asistencia social

569

11,0

71

Servicios de esparcimiento culturales y deportivos, y otros servicios recreativos

34

0,7

72

Servicios de alojamiento temporal y de preparación de alimentos y bebidas

68

1,3

81

Otros servicios excepto actividades gubernamentales

695

13,4

Total, general

5 185

100

Fuente: Elaboración propia, con base en el directorio comercial para la Ciudad de México de Jerónimo Figueroa Doménech. Guía general descriptiva y la clasificación propuesta por el Sistema de Clasificación Industrial de América del Norte, INEGI, 2007. https://www.inegi.org.mx/app/scian/.

Gráfico 1. Clasificación de registros de la actividad económica de la ciudad de México, 1899 a partir de la clasificación SCIAN

Fuente: Elaboración propia, con base en el directorio comercial para la Ciudad de México publicado por Jerónimo Figueroa Doménech. Guía general descriptiva., y la clasificación propuesta el Sistema de Clasificación Industrial de América del Norte, INEGI, 2007. https://www.inegi.org.mx/app/scian/.

Mapa 2. Unidades económicas agrupadas por sectores en los cuarteles de la Ciudad de México, 1899

Fuente: Elaboración propia, con base en el «Plano general de indicaciones de la Ciudad de México…» (1886) y el directorio comercial para la Ciudad de México publicado por Jerónimo Figueroa Doménech. Guía general descriptiva. El tamaño del gráfico es proporcional al número de establecimientos que representa.

Tabla 3. Registros por cuartel y sector en la Ciudad de México, 1899

Cve. Sector

Sector

Cuartel

Total, general

I

II

III

IV

V

VI

VII

VIII

11

Agricultura, cría y explotación de animales, aprovechamiento forestal, pesca y caza

0

2

3

7

0

2

0

1

15

21

Minería

1

0

2

20

0

3

0

0

26

22

Generación, transmisión, distribución y comercialización de energía eléctrica, suministro de agua y de gas natural por ductos al consumidor final

0

3

1

6

2

1

0

13

23

Construcción

20

58

71

70

61

43

18

7

348

31-33

Industrias manufactureras

27

146

97

212

32

81

23

6

624

43

Comercio al por mayor

0

24

6

38

2

3

1

0

74

46

Comercio al por menor

88

284

294

553

122

122

46

19

1 528

48-49

Transportes, correos y almacenamiento

1

2

7

22

0

13

4

2

51

51

Información en medios masivos

9

21

40

63

8

20

3

1

165

52

Servicios financieros y de seguros

15

36

52

276

7

18

8

3

415

53

Servicios inmobiliarios y de alquiler de bienes muebles e intangibles

6

8

5

20

0

2

0

0

41

54

Servicios profesionales, científicos y técnicos

62

59

128

129

30

51

39

18

516

61

Servicios educativos

1

0

1

0

0

1

0

0

3

62

Servicios de salud y de asistencia social

46

76

132

186

38

59

24

8

569

71

Servicios de esparcimiento culturales y deportivos, y otros servicios recreativos

0

1

1

21

2

8

0

1

34

72

Servicios de alojamiento temporal y de preparación de alimentos y bebidas

0

5

3

56

1

1

2

68

81

Otros servicios excepto actividades gubernamentales

50

134

127

214

68

71

27

4

695

Total general

326

859

970

1 893

373

497

195

72

5 185

%

6,3

16,6

18,7

36,5

7,2

9,6

3,8

1,4

100

Fuente: Elaboración propia, con base en el directorio comercial para la Ciudad de México publicado por Jerónimo Figueroa Doménech: Guía general descriptiva, y la clasificación propuesta el Sistema de Clasificación Industrial de América del Norte, INEGI, 2007. Recuperado de internet: https://www.inegi.org.mx/app/scian/. [Consultado el 30/04/20]

La Tabla 3 muestra el número de registros asociados a cada uno de los sectores propuestos y relacionados a su ubicación por cuartel. En términos de identificar patrones de aglomeración al interior de la ciudad, destaca que el cuartel IV es el que agrupa la mayor cantidad de registros 1893 que corresponden al 36,5 % del total, seguido del cuartel III con un total de 970 registros equivalentes al 18,7 % del total de registros, mientras que el que tiene la menor cantidad de registros es el cuartel VIII con un total de 72 puntos que representan el 1,4 % del total de registros ubicados.

En toda la ciudad el promedio de establecimientos por manzana ocupada es de 12, pero el promedio de establecimientos en los dos cuarteles con más puntos —III y IV— es muy superior —15 y 29 establecimientos por manzana ocupada—, lo que habla de una mayor aglomeración de puntos en estos dos cuarteles dentro de la ciudad.

Cabe destacar que, en términos de aglomeración por manzana, la manzana 13 cuartel IV —en las calles de Independencia y San de Letrán— aglutina 116 puntos y es la de mayor aglomeración. De las 10 manzanas en toda la ciudad con mayor cantidad de puntos, 7 se encuentran en el cuartel IV y 3 en el cuartel número III. La siguiente tabla —tabla 4— muestra las equivalencias de los registros dados en el directorio de Figueroa Doménech y la integración de estos considera los criterios definidos por el SCIAN.

Tabla 4. Registro de equivalencias del directorio de 1899-SCIAN

*Sector(SCIAN)

     **Subsector

Número de registros

***Ramo-negocio (Figueroa Doménech)

Subsector

Sector

[11] Agricultura, cría y explotación de animales, aprovechamiento forestal, pesca y caza

15

Agricultura

4

Exportadores de frutos del país; plantas forrajeras; plantas frutales y de adorno

Ganadería

11

Compra y venta de ganados

[21] Minería

26

Metalistería y joyería

8

Ensayes, establecimientos y agencias para compra y venta de metales preciosos

Minería

18

Compañías explotadoras de minas

[22] Generación, transmisión, distribución y comercialización de energía eléctrica, suministro de agua y de gas natural por ductos al consumidor final

13

Energía eléctrica

12

Agencias para instalaciones eléctricas; empresas de alumbrado

Gas

1

Gas acetileno

[23] Construcción

348

Construcción

143

Artículos para alumbrado; canteros en mármol;  maderería;  materiales para construcción;  mosaicos hidráulicos;  plomerías

Trabajos especializados para la construcción

205

Cañería y tubos de barro; carpinterías y de comercio; carpinterías y ebanisterías; decorado para vidrieras; pintores; pintura del vidrio

[31-33] Industrias manufactureras

624

Curtido y acabado de cuero

79

Curtiduría; peleterías y corambrerías; talabarterías

Fabricación de equipo de transporte

5

Fábrica y expendios de carruajes finos

Fabricación de maquinaria y equipo

103

Bandas para maquinaria; calderas de vapor; cobrerías y caldereros; fábrica de sellos de goma y de metal; fundición de tipos de imprenta; hojalatería; maquinaria de todas clases; maquinaria para agricultura; maquinaria para ingenios de azúcar

Fabricación de muebles

16

Fábrica de camas de hierro y latón; fábrica de sillas; fábrica y expendio de espejos y lunas

Fabricación de prendas de vestir

40

Contratistas de vestuario para tropas; fábrica de camisas, medias, etc. Tejidos de punto; fábrica y expendio de camisas; fábrica de camisetas, medias, etc. Géneros de puntos; fábrica de corbatas; fábrica de cordones; fábrica de guantes

Fabricación de productos derivados del petróleo

2

Refinerías de petróleo

Fabricación de productos metálicos

29

Cajas de hierro para caudales; fundiciones; hierro galvanizado; tornero en metal

Fabricación de productos textiles

18

Fábrica de manta y percales estampados; fábrica de pasamanería; fábrica de ovillos para hilos; fábrica de toquillas

Industria alimentaria

65

Fábrica de galletas; fábrica y expendio de chocolate; fábrica de pan «panaderías»; fábrica de pastas alimenticias; molino de aceite; molino de café; molino de maíz; molino de trigo

Industria de las bebidas y el tabaco

31

Destiladora; fábrica de cigarrillos; fábrica de tequila; fábrica de aguardiente y licor; fábrica de aguas gaseosas; fábrica de vinos de membrillo y vinagres finos; fábrica y despacho de cerveza

Industria del papel

43

Fábrica de cartón; fábrica y expendio de papel tapiz; fábrica de libros en blanco; fábrica de naipes; fábrica de papel; fábrica de sobres; fábrica o taller de cajas de cartón

Industria química

72

Ácidos y productos químicos; explosivos; fábrica de jabón; fábrica y expendio de cerillas fosfóricas; fábrica y expendio de cererías; fábrica de barnices y pinturas; fábrica de cola; fábrica de velas de cera y esteáricas; fábrica de almidón; fábrica de encerados

Otras industrias manufactureras

121

Afiladuría; doraduría; fábrica de cepillos; fábrica de alambre; fábrica de albayalde; fábrica de baúles; fábrica de loza y porcelanas; fábrica y expendio de sombrerías; fábrica y expendio de hielo; fábrica y expendio de vidrios planos y huecos; fábricas de flores artificiales; fábricas de fustes y hormas;  fábrica y expendio de pianos y órganos; platerías; tonelería; tornero en madera, hueso o marfil

[43] Comercio al por mayor

74

Artículos de ferretería, tlapalería y vidrio

21

Almacenes al por mayor y menor ferreterías; jarcería y depósito

Artículos de papelería, para el esparcimiento y uso personal

18

Mercerías por mayor y menor

Comercio al por mayor de abarrotes, alimentos, bebidas, hielo y tabaco

3

Despachos por mayor de cigarros y puros

Materias primas agropecuarias

32

Depósito y expendios de granos y semillas; depósitos y expendios de maíz, trigo, harinas, etc. Granos y semillas; depósitos y expendios de semillas, plantas y flores

[46] Comercio al por menor

1 528

Abarrotes, alimentos y bebidas

498

Abarrotes al por menor; Abarrotes nacionales y extranjeros; carnicerías; dulcerías y pastelerías; queserías; tienda al por menor; vinos y coñacs

Artículos de ferretería, tlapalería y vidrio

155

Al por menor ferreterías; jarcerías; tlapalería

Artículos de papelería, para el esparcimiento y uso personal

194

Útiles para bellas artes; almacén de curiosidades mexicanas; rrtículos de fantasía; artículos italianos; artículos para fotografías; bolsas de papel; cuadros al óleo, cromos, acuarelas, etc.; fotografías; instrumentos de música; joyerías; jugueterías; librería; librería de viejo; máquinas para escribir; mercerías al por menor; papelería; pianos con tres pedales

Artículos para el cuidado de la salud

116

Boticas; droguerías; instrumentos científicos y ortopédicos

Combustibles

25

Combustibles; combustibles (leña y carbón)

Muebles y enseres domésticos

56

Almonedas de muebles; cristalerías y depósitos de loza y porcelanas; depósitos Alfombras y tapices; mueblería (por mayor y menor)

Productos textiles y calzado

379

Alpargaterías; artículos para ropa (almacenes al por mayor y por menor); boneterías; corsetería; expendio al por menor de sombrerías; expendio de lana y borra de lana; hilo para coser; modista y tiendas de modas; paragüería; rebocerías; sederías (al por menor); zapaterías

Varios

105

Armero; armería; baratas; bazares; coheterías; depósitos para máquinas de coser

[48-49] Transportes, correos y almacenamiento

51

Comunicaciones

4

Empresas de teléfonos; telégrafos y cables, telegráficos submarinos

Transporte

47

Alquiler de caballos y pensiones; carrocerías; ferrocarriles; guarniciones para caballos y carruajes; material para ferrocarriles; transportes marítimos; transportes terrestres

[51] Información en medios masivos

165

Edición de periódicos, revistas y libros

104

Encuadernadores; imprentas y litografías; tórculos

Información en medios masivos

61

Agencia de anuncios; agencia de publicaciones; periódicos y revistas; revistas

[52] Servicios financieros y de seguros

415

Actividades bursátiles, cambiarias y de inversión financiera

183

Acciones de minas; agentes de bolsa; agentes de negocios (sin Títulotítulo); agentes de negocios (titulados); banco; banqueros; casa de cambio de moneda; compra-venta de acciones mineras; corredores

Comisionistas

211

Comerciantes y comisionistas en general; comisionistas

Compañías de seguros y fianzas

21

Agentes de compañías para seguros contra incendios; seguros contra accidentes; seguros contra riesgos marítimos; seguros de vida

[53] Servicios inmobiliarios y de alquiler de bienes muebles e intangibles

41

Agencias inmobiliarias

7

Agencias para compra venta de terrenos y casas

Alquiler de marcas registradas y patentes

34

Agencias para la consecución de patentes y privilegios; patentes y privilegios

[54] Servicios profesionales, científicos y técnicos

516

Servicios profesionales

516

Ingenieros; abogados; notarios; agentes viajeros de casas extranjeras; traductor; veterinarios

[61] Servicios educativos

3

Escuelas

3

Colegios particulares

[62] Servicios de salud y de asistencia social

569

Asistencia social

8

Agencias de inhumaciones; casa de salud; lotería

Farmacéuticos

101

Farmacéuticos

Médicos/dentistas/parteras

460

Dentista; médico alópata; médicos especialistas; médicos homeópatas sin título; médicos homeópatas titulados; parteras

[71] Servicios de esparcimiento culturales y deportivos y otros servicios recreativos

34

Alquiler

15

Venta y alquiler de bicicletas

Esparcimiento

12

Cafés y billares; frontones; sala de tiro y esgrima

Teatro y música

7

Agentes teatrales; repertorio de música

[72] Servicios de alojamiento temporal y de preparación de alimentos y bebidas

68

Alimentación

30

Cantinas sin restaurante; Restaurantes y cantinas

Hospedaje  

38

Casas de huéspedes; hoteles y casas de huéspedes

[81] Otros servicios excepto actividades gubernamentales

695

Asociaciones y organizaciones religiosas

93

Ministros católicos; ministros protestantes

Cuidado personal

197

Baños; peluquería y barbería; peluquería; perfumería (fábrica y expendios)

Elaboración de prendas de vestir

158

Sastrería con venta de ropa hecha y a la medida; taller de modistas; taller de sastrerías; talleres de bordados

Joyerías

50

Relojerías y talleres de relojeros; taller de dorar, platear y niquelar

Muebles

37

Tapicero y colchonero

Reparación de artículos para el hogar y personales

48

Alfarerías (fábricas y expendios); taller de diamantistas o lapideros; taller de escultores; taller de herradores

Reparación y mantenimiento de automóviles y camiones

3

Taller mecánico

Reparación y mantenimiento de maquinaria industrial, comercial y de servicios

10

Grabador en metal

Servicios de reparación y mantenimiento

13

Afinadores de pianos y talleres de reparación; maestro de obras

Servicios personales

78

Lavaderos públicos; lavandería; tintorerías

Varios

8

Específicos; municiones y otros pertrechos de guerra y caza; rayados de todas clases

Total, general

5 185

Fuente: Elaboración propia, con base en el directorio comercial para la Ciudad de México publicado por Jerónimo Figueroa Doménech. Guía general., y la clasificación propuesta el Sistema de Clasificación Industrial de América del Norte, INEGI, 2007. https://www.inegi.org.mx/app/scian/.

Documentos y archivos consultados

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«Calendarios mexicanos. Siglos XIX y XX» en Fuentes para el estudio de la historia social (siglos XIX y XX), Instituto de Investigaciones Históricas. Calendario mercantil: para el año 1871: arreglado al meridiano de México, México: Tip. de la V. e hijos de Murguía, 1870. http://hsocial.historicas.unam.mx/index.php/calendarios/calendarios/246-calendario-528

«Código publicado en el Diario Oficial de la Federación los lunes 7 de octubre al viernes 13 de diciembre de 1889». http://ordenjuridico.gob.mx/Documentos/Federal/html/wo38904.html

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«Librería Herrero», Enciclopedia de Literatura Mexicana, Instituto de Investigaciones Filológicas- UNAM. http://www.elem.mx/institucion/datos/1373.

«Los Porrúa y sus casas», La Voz de Galicia, 20 de octubre de 2017. https://www.lavozdegalicia.es/noticia/carballo/corcubion/2017/10/20/porrua-casas/0003_201710C20C7994.htm.

«Plano general de indicación de la Ciudad de México: con la nueva división de los cuarteles y nomenclatura de las calles aprobado por el H. Ayuntamiento de 1885 y por el gobierno del distrito». Chapultepec: Debray Sucs, 1886. https://www.davidrumsey.com/luna/servlet/detail/RUMSEY~8~1~291452~90062832:Plano-general-de-indicacion-de-la-C?sort=Pub_List_No_InitialSort%2CPub_Date%2CPub_List_No%2CSeries_No&qvq=w4s:/where%2FMexico%2Fwhen%2F1886;sort:Pub_List_No_InitialSort%2CPub_Date%2CPub_List_No%2CSeries_No;lc:RUMSEY~8~1&mi=0&trs=43.

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1 Jerónimo Figueroa Doménech, Guía general descriptiva de la República Mexicana, historia, geografía, estadísticas, etc. etc. con triple directorio del comercio y la industria autoridades oficinas públicas, abogados Médicos, hacendados, correos, telégrafos y ferrocarriles, etc. et etc. (México-Barcelona: Ramon de s. N. Araluce, 1899), http://cdigital.dgb.uanl.mx/la/1020001211_C/1020001211_T1/1020001211_T1.html.

2 El primer levantamiento de datos se realizó en 2014 por un primer grupo de becarios que fueron dirigidos por Tania Chávez y María Dolores Lorenzo en El Colegio Mexiquense. Los avances alcanzados pudieron continuarse con el apoyo de la Dirección General de Asuntos de Personal Académico de la UNAM, (Proyecto PAPITT núm. IA401319), a este se sumó Leonor Ludlow en la codirección.

3 «Plano general de indicación de la Ciudad de México: con la nueva división de los cuarteles y nomenclatura de las calles aprobado por el H. Ayuntamiento de 1885 y por el gobierno del distrito» (Chapultepec: Debray Sucs, 1886), https://www.davidrumsey.com/luna/servlet/detail/RUMSEY~8~1~291452~90062832:Plano-general-de-indicacion-de-la-C?sort=Pub_List_No_InitialSort%2CPub_Date%2CPub_List_No%2CSeries_No&qvq=w4s:/where%2FMexico%2Fwhen%2F1886;sort:Pub_List_No_InitialSort%2CPub_Date%2CPub_List_No%2CSeries_No;lc:RUMSEY~8~1&mi=0&trs=43.

4 «Sistema de Clasificación Industrial de América del Norte», Instituto Nacional de Estadística Geografía INEGI. Acceso el 30 de abril de 2020, https://www.inegi.org.mx/app/scian/.

5 Véase para el uso de los sistemas de georreferenciación, para el análisis histórico del espacio urbano, a través de fuentes estadísticas de la Ciudad de México, el trabajo precursor de Hira de Gortari Rabiela, Morfología de la ciudad de México: El catastro de fines del siglo XIX y de 2000. Estudios de caso (México: Instituto de Investigaciones Sociales-UNAM, 2012).

6 Kuntz Ficker, Sandra, «La inserción en la economía internacional y la modernización económica (1880-1929)», en: Carmagnani, Marcelo (coord.) y Hernández Chávez (dir.), México contemporáneo 1808-2014. La economía (México: El Colegio de México, Fundación Mapfre, Fondo de Cultura Económica, 2015), 155-156.

7 Por ejemplo, Juan N. del Valle elaboró una lista alfabética de referencias sobre prohibiciones, multas, usos y servicios urbanos que eran necesarios para establecerse en la ciudad sin incurrir en faltas «El viajero en México. Completa guía de forasteros» (México: Imprenta Andrade y Escalante, 1864), http://cdigital.dgb.uanl.mx/la/1020004349/1020004349.html. Corvera Poiré, Marcela, «Las guías de forasteros en el México del siglo XIX» en Clark de Lara, Belén y Elisa Speckman Guerra (eds.), La República de las letras. Asomos a la cultura escrita del México decimonónico. Volumen II. Publicaciones periódicas y otros impresos (México: Universidad Nacional Autónoma de México, 2005), 357. Respecto de la mirada erudita sobre el territorio mexicano, José Enrique Covarrubias, Visión extranjera de México, 1840-1867. I. El estudio de las costumbres y de la situación social (México, Universidad Nacional Autónoma de México, Instituto de Investigaciones Dr. José María Luis Mora, 1998).

8 Véase el Calendario mercantil: para el año 1871: arreglado al meridiano de México (México: Tip. de la V. e hijos de Murguía, 1870). En la siguiente página se pueden revisar los calendarios de años anteriores y posteriores a 1871: http://hsocial.historicas.unam.mx/index.php/calendarios/calendarios/246-calendario-528

9 Figueroa Doménech, «Guía general..., tomo 1», 10-11.

11 Lilia Vieyra Sánchez, «Negocios culturales del asturiano Juan Fuentes Parres en México», Revista internacional de Historia de la comunicación, n.º 12 (2019): 287-304, http://dx.doi.org/10.12795/RiHC.2019.i12.14.

12 «Los Porrúa y sus casas», La Voz de Galicia, 20 de octubre de 2017. https://www.lavozdegalicia.es/noticia/carballo/corcubion/2017/10/20/porrua-casas/0003_201710C20C7994.htm.

13 Solo se localizaron ejemplares en la Biblioteca México, Conaculta.

14 «Librería Herrero», Enciclopedia de Literatura Mexicana (México: Instituto de Investigaciones Filológicas- UNAM), http://www.elem.mx/institucion/datos/1373.

15 Leonor Ludlow, «Empresarios y banqueros: entre el Porfiriato y la Revolución», en Clara E. Lida (comp.), Una inmigración privilegiada. Comerciantes, empresarios y profesionales españoles en México en los siglos XIX y XX (Madrid: Alianza Editorial, 1994), 143.

16 Pedro Pérez Herrero, «Algunas hipótesis de trabajo sobre la inmigración española a México: los comerciantes» en Tres aspectos de la presencia española en México durante el Porfiriato: Relaciones económicas, comerciantes y población, ed. por Clara E. Lida (México: El Colegio de México, 1981) 128, doi:10.2307/j.ctv233mm2.7.

17 Clara E. Lida, Una inmigración privilegiada: comerciantes, empresarios y profesionales españoles en México en los siglos XIX y XX (Madrid: Alianza Editorial, 1994) 30, http://catbiblio.uv.mx:8080/uhtbin/cgisirsi/Tue+Feb+20+15:02:20+CST+2007/0/0/49.

18 Manuel Miño Grijalva, «Tendencia generales de las relaciones económicas entre México y España», en Tres aspectos de la presencia española en México durante el Porfiriato: Relaciones económicas, comerciantes y población, ed. por Clara E. Lida (México: El Colegio de México, 1981) 34-39 y 42-44,
http://dx.doi.org/doi:10.2307/j.ctv233mm2.6.

19 Emile Chabrand. De Barceloneta a la República Mexicana (México: Banco de México, 1987), 392.

20 Carla Montero, Ziania Reyes, Miguel Ángel Arellano son los becarios del proyecto Papiit.

21 En el plano de la Ciudad de México ubicamos 5 185 registros de comercios a partir de la dirección registrada en el directorio de Figueroa Doménech. El resto de los registros capturados (232) no contenían información suficiente para su ubicación.

22 Para el uso y homologación de los criterios SCIAN véase la introducción a la clasificación de la industria comercio y servicios: https://www.inegi.org.mx/contenidos/app/scian/tablaxiv.pdf

23 «Plano general de indicación...».

24 «Sistema de Clasificación Industrial de América del Norte», INEGI, 2007. https://www.inegi.org.mx/app/scian/. Con el apoyo de dos grupos de becarios, sistematizamos la información de los comercios asentados en el directorio de Figueroa Doménech.

25 El sector constituye el nivel más agregado de la clasificación y agrupa a las actividades de una misma naturaleza, con similar función de producción en el sentido más amplio. Ibíd.

26 El subsector está delimitado por el tipo de bienes producidos y de servicios prestados y por el proceso, tecnología y forma de organización con que aquellos se efectúan. Ibíd.

27 La rama de actividad agrupa las subramas en que se realizó, de acuerdo con la naturaleza del sector y con base en las semejanzas de insumos empleados, bienes o servicios manejados, el nivel de especialización del personal o los tipos de tecnología y técnicas utilizadas. Ibíd.

28 Las subramas y clases de actividad fueron definidas tomando en cuenta la forma de operar solo de las unidades económicas, es decir, la forma en que se organizan para producir —combinan procesos, materiales, mano de obra—. Ibíd.

29 Cuando se identifica una actividad económica específica en una unidad económica definida se está frente a un proceso productivo, el cual se define como el conjunto de factores —maquinaria, equipo, materia prima, fuerza de trabajo, organización, etc.— que se integran para obtener un producto o servicio específico. Ibíd.

30 Es importante recalcar este hecho porque las actividades que el SCIAN enuncia en su estructura fueron definidas con base en la similitud de los procesos de producción que se llevan a cabo en las unidades económicas.

31 El número de sector corresponde al que estipula el SCIAN, así como la descripción que trascribimos en la tabla y que es el criterio para la sistematización de mapas, tablas y gráficos en el anexo.

32 Diversos aspectos de la estructura ocupacional de la Ciudad de México han sido estudiados por Pérez Toledo, Sonia. Trabajadores, espacio urbano y sociabilidad en la Ciudad de México, 1790-1867 (México: Universidad Autónoma Metropolitana/Miguel Ángel Porrúa, 2011).

33 «Código publicado en el Diario Oficial de la Federación los lunes 7 de octubre al viernes 13 de diciembre de 1889». Artículos 273 a 308. http://ordenjuridico.gob.mx/Documentos/Federal/html/wo38904.html.

34 Eventualmente publicaremos los más de 5 000 registros del directorio comercial con el propósito de que el público interesado tenga acceso a esta información. Mientras tanto puede solicitar la consulta de manera personal a las autoras.

35 Archivo Histórico de la Ciudad de México (AHCM), Ayuntamiento, Padrón General de la Ciudad de México, 1882.


Fecha de recepción: 19/05/2020 - Fecha de aceptación: 14/08/2020

* Mexicana. Doctora, Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMex), México. Jefa de la Unidad de Tecnologías de Información y Comunicaciones en El Colegio Mexiquense (CMQ), Estado de México, México. Correo electrónico: tchavez@cmq.edu.mx.
ORCID: https://orcid.org/0000-0002-6884-0415.

** Mexicana. Doctora, El Colegio de México (COLMEX), Ciudad de México, México. Investigadora Titular A en el Instituto de Investigaciones Históricas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Ciudad de México, México. Correo electrónico: dlorenzo@unam.mx.
ORCID: https://orcid.org/0000-0002-8972-7956.

*** Mexicana. Doctora, El Colegio de Michoacán (COLMICH), Michoacán, México. Investigadora Titular C en el Instituto de Investigaciones Históricas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Ciudad de México, México. Correo electrónico: ludlow@unam.mx.
ORCID: https://orcid.org/0000-0001-6788-681X.

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