Revista de Política Económica y Desarrollo Sostenible

EISSN: 2215-4167 • Vol. 6 (1) • Julio-Diciembre, 2020: 1-3

URL: http://www.revistas.una.ac.cr/politicaeconomica

Revista electrónica semestral publicada por el Centro Internacional de Política Económica para el Desarrollo Sostenible

Universidad Nacional, Lagunilla, Heredia Apartado 2393-3000

Pensamiento y práctica de la Política Económica:

Reflexiones en el marco del 25 aniversario del CINPE

Olman Segura Bonilla, Ph.D1

CINPE-UNA, Director General

olman.segura.bonilla@una.ac.cr

https://orcid.org/0000-0002-5461-1769

El 2020 marca el 25 aniversario desde la fundación de este centro académico. Es un gran motivo para celebrar muchos logros, aunque este festejo coincida lamentablemente con una situación difícil, tanto a nivel mundial como en nuestro país, como lo es la pandemia provocada por el coronavirus.

En el Centro Internacional de Política Económica para el Desarrollo Sostenible (CINPE) nos enorgullecemos de ser un centro de investigación con una sólida trayectoria, pero sobre todo nos inunda la satisfacción de pertenecer a nuestra gloriosa Universidad Nacional, Costa Rica. En nuestro caminar, progresivamente, hemos realizado aportes indiscutibles para el desarrollo social, económico, científico y académico de nuestro país. Cada vez somos una institución que se proyecta con más fuerza en el ámbito nacional e internacional, externando opinión, abriendo brecha en el campo de la investigación en temas de política económica y afines en función del desarrollo sostenible, y aportando soluciones en medio de una crisis que pone a prueba los cimientos de nuestro bienestar y paz social.

Si bien esta ocasión –teñida con matices conmemorativos– nos convoca a repasar nuestro caminar, esta no puede quedar circunscrita una revisión histórica de nuestros logros y aportes, o tan siquiera a la realización de actividades especiales por estos 25 años de fructífera contribución a la academia y a la sociedad. Por el contrario, representa tanto un alto en el camino como una oportunidad para, con un compromiso ineludible, emprender renovados derroteros que nos permitan mejorar nuestro quehacer y, con ello, continuar formando, orientando, generando nuevo conocimiento, aplicando teoría a realidades concretas; en fin, todo lo que nos impone la noble misión de nuestra organización.

Hoy más que nunca estamos obligados a demostrar una preparación cabal de excelencia, con el mayor rigor académico, impregnado, además, de un sentido ético y humanista, para hacer frente al reto imperioso de resolver problemas de forma creativa e inspiradora en el ámbito de nuestras competencias académicas. Igualmente, estamos en la obligación de forjar más investigación científica y aplicada, todo ello con el fin de contribuir con éxito a la solución frontal de los actuales desafíos políticos, sociales, económicos y ambientales de nuestro país. Hablar con la verdad y decir abiertamente el resultado de nuestras investigaciones, aunque incomode a algunos grupos o autoridades, se hace necesario en el marco del respeto y la institucionalidad.

Nos corresponde coadyuvar a que nuestros jóvenes tengan acceso a educación de excelencia aun en medio de tantas desigualdades; nos compete arrojar luces para que coterráneos tengan techo y alimento y se alejen de la miseria; nos convoca el llamado de una sociedad urgida de construir más justicia solidaria; nos impone la tarea de velar por que nuestro patrimonio natural recobre su esencia amigable y se aleje de los peligros que lo amenazan. Es imperativo tener como aliado al desarrollo científico y tecnológico y que este vaya de la mano con el desarrollo humano; nos anima el llamado de convertir la paz tan preciada de nuestra tierra en un faro que guíe nuestra convivencia y haga realidad nuestros ideales y aspiraciones de comunidad fraternal y humanitaria. Nos inspira la necesidad de guiar, por un sendero de solidez académica, a nuevas generaciones que sean capaces de edificar el futuro desarrollo mediante instrumentos innovadores y modernos y sobre bases firmes de paz, sostenibilidad y armonía.

Educar es una de las tareas más difíciles, pero a la vez una de las que mayores satisfacciones brinda, porque significa echar raíces, generar nuevos espacios de convivencia, hacer posible que haya construcción de ciudadanía crítica y apegada a principios éticos. Nuestro llamado es redescubrir el pensamiento y la práctica de la política económica desde cada una de las aristas que se nos convoca. Así, se buscará promover y direccionar las acciones y decisiones de los actores económicos de modo que se logren los objetivos de la realidad deseada o imagen objetivo, buscando mayor estabilidad, crecimiento económico y sostenibilidad en el país.

Nuestro aporte sigue vigente y el compromiso con la sociedad costarricense aún más. Es por ello que dentro nuestras actividades de celebración, pero sobre todo con miras a continuar aportando en el desarrollo del país, este mes de noviembre contamos con dos actividades que nos llenan de orgullo. La primera fue la inauguración del Doctorado en Política Económica, para la cual contamos con la charla de apertura impartida por la Contralora General de la República, la señora Marta Acosta, con el tema “La situación financiera del Gobierno Central de Costa Rica”. Además, nuestra revista institucional suma su primer quinquenio, razón por la cual se hizo una convocatoria bajo el título “Pensamiento y práctica de la Política Económica”, el cual derivó en la publicación de 4 artículos científicos y dos editoriales, a través de los cuales podremos conocer los planteamientos de los siguientes autores: Francisco Esquivel, Daniela García, Sofía Guillén, Jeffrey Orozco, Jorge Rodríguez, Ana Herrera y Zsuzsanna Rózsa Campos Tomcsányi.

Sea este un punto de partida para 25 nuevos años de crecimiento, de consolidación de nuestros objetivos, de proyección a la comunidad y a la nación. Se avecinan años difíciles y décadas complejas aquí y en el resto del mundo. En estos nuevos contextos, muchas tareas de ayer se han vuelto crecientemente retos ineludibles para el futuro.

Quiero expresar mi más imperecedero agradecimiento a quienes han contribuido y, hoy día, continúan contribuyendo al engrandecimiento académico de CINPE y a su proyección en nuestra sociedad y más allá de ella. Sin los aportes de tantas personas a lo largo de tantos años, CINPE no sería lo que hoy representa a lo interno de nuestra universidad y en el contexto nacional. Veinticinco años de compromiso en la construcción de un anhelo de formar mejores profesionales y ciudadanos del mundo nos hacen coincidir. Nuestro mejor premio no está en el resultado tangible e imborrable de tan ardua faena, sino en el denodado esfuerzo de quienes han apostado a ser referentes de un proyecto común en la trayectoria de CINPE.

En esta fecha de aniversario institucional, también es justo reconocer el trabajo de todas las personas que desarrollan labores de administración y servicios. Todos ellos constituyen un elemento fundamental en el funcionamiento y desarrollo de nuestra querida entidad. Quiero agradecer a toda la familia de CINPE su compromiso permanente con la causa que nos une y auguro que, si nos mantenemos unidos y fortalecidos en nuestros ideales, seremos capaces de continuar permeando positivamente a nuestra sociedad.

El CINPE está llamado a ser testigo de excepción y protagonista, a la vez, de un cambio generacional que será determinante en la proyección de los nuevos sueños y anhelos de la patria. Estamos a las puertas del Bicentenario de nuestra independencia, un momento sublime de reflexión, pero también de obligado llamado a la acción. Estamos en medio de una crisis económica enorme en nuestro país, que se traduce en aumento de la desigualdad y en un caldo de cultivo para el conflicto y la confrontación social. Desde el CINPE hemos hecho nuestros análisis y con humildad y seriedad hemos presentado las recomendaciones al Gobierno de la República, a las señoras y señores diputados y al público en general. Seguimos anuentes a continuar ayudando en el análisis y la propuesta de alternativas de política económica.

¡Que vivan estos veinticinco años de fructífera convivencia en CINPE! ¡Que viva nuestra Universidad Nacional! ¡Que viva la Patria, a las puertas de alcanzar sus primeros doscientos años de armoniosa convivencia! Finalmente, que esta celebración nos brinde la perspectiva para repensar el camino recorrido hasta el presente. Que este hito histórico nos convoque como nación para imaginar y construir juntos el país que aspiramos tener y recorrer decididamente el sendero para convertirlo en realidad.

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