Carlos Paniagua Arguedas

(Conversa en un café, en un plenario o, simplemente, por deporte. Un peón blanco entra y coloca el tablero)

Rey Blanco: El tablero debe ir diez pasos hacia adelante y veintiún pasos por cuatro hacia la izquierda. (El peón lo observa) La posición es importante. Si no se tiene una posición no se puede llegar a ninguna parte. El cuadro blanco debe estar al lado derecho mío. (El peón lo vuelve) Mejor.

Peón Blanco: ¿Cuál es su posición?

Rey Blanco: ¿Disculpe?

Peón Blanco: ¿Cuál es su posición? Eso dije.

Rey Blanco: No es de su incumbencia. (Pausa) Si está pretendiendo ser listo, siga haciéndolo. (Pausa) Le planteo un problema y usted me lo resuelve. A juzgar. Tiene usted un peón enemigo en la casilla e5 y un alfil suyo en la posición e4. ¿Cómo obtengo un jaque mate inmediato?

Peón Blanco: Depende…

Rey Blanco: Esa es la única opción.

Peón Blanco: De la nada no lo puedo deducir, tengo que saber detalles.

Rey Blanco: Error. Por tales respuestas es que no cualquiera puede llegar a ser rey. Fácil. El alfil hace un movimiento transversal de cuatro casillas, lo que quiere decir que en la posición anterior ya estaba en jaque. Nunca se debe decir cuando se está en jaque, si se avisa, el ataque tiene menor peso.

Peón Blanco: Me parece que es una respuesta un tanto…

Rey Blanco: ¿Qué?

Peón Blanco: Sagaz.

Rey Blanco: Bien. ¿A qué hora fue pactada la partida? (Saca una manzana y un cuchillo y se la empieza a comer a pedazos)

Peón Blanco: A las cinco y cuarenta y cinco.

Rey Blanco: No entiendo el vulgo.

Peón Blanco: A las dieciocho menos quince.

Rey Blanco: Mucho mejor la matemática (le tira un pedazo de manzana mordida)

Peón Blanco: Razonable para los que saben. Para el que no sabe es como leer un periódico en otro idioma, lo que nos muestran las imágenes es con lo que nos quedamos. En operaciones como la adición y sustracción el mayor es el que se ve más, o menos beneficiado. Más por menos. Siempre el que tiene más.

Rey Blanco: ¿Qué quiere decir?

Peón Blanco: Nada, simplemente divago en el no saber.

Rey Blanco: Pues bien. Parecen ser las diecisiete y media. Es hora de prepararse. Adelante dos casillas antes de empezar.

Peón Blanco: ¿eso se puede?

Rey Blanco: Es el mismo caso que lo del alfil.

Peón Blanco: Bien.

Rey Blanco: La preparación surge como necesidad. Prepárese.

Peón Blanco: Me preparo.

Rey Blanco: Salto. No. No salte. Camine dos, atrase uno. Camine dos.

Peón Blanco: ¿Jaque?

Rey Blanco: Bien. Muy bien parece que está aprendiendo rápido. Peón Blanco: (Pausa. Observa) Parece que la flota no está completa. Rey Blanco: ¿Perdón?

Peón Blanco: No está completa.

Rey Blanco: Dígame que usted está equivocado.

Peón Blanco: No.

Rey Blanco: Esa es su responsabilidad pedazo de imbécil. Es su responsabilidad reclutar.

Peón Blanco: Pensé que era…

Rey Blanco: No se le ocurra contradecirme.

Peón Blanco: Señor…

Rey Blanco: (Parte un pedazo y se lo come) Si va a comer en un restaurante usted esperaría que le traigan los instrumentos para comer ¿verdad?

Peón Blanco: Sólo está la torre, que a decir verdad…

Rey Blanco: Basta. Si no hay alfil, ni caballos, ni más imbéciles, la batalla está bajo su responsabilidad. No fue mi idea esta partida.

Peón Blanco: Usted había dicho…

Rey Blanco: ¿Había dicho qué? (Corta un trozo y se lo come)

Peón Blanco: Nada señor.

Rey Blanco: Bien. Aprende rápido. (Pausa)

Peón Blanco: Señor. ¿Que pasaría si usted tiene a un alfil enemigo en la posición e3 y a un peón suyo en la posición e2?

Rey Blanco: A esa pregunta le corresponde una respuesta suya.

Peón Blanco: Lo utilizaría para protegerse.

Rey Blanco: Esa respuesta es suya. Me parece de muy mal gusto hablar de los hermanos ante un peligro inminente.

Peón Blanco: ¿Lo haría? Rey Blanco: ¿Lo haría? Peón Blanco: No lo sé señor.

Rey Blanco: No lo sé. (Pausa) ¿Qué le pasa?

Peón Blanco: Nada, simplemente divago en el no saber.

Rey Blanco: Saque la torre.

Peón Blanco: Voy.

Rey Blanco: No.

Peón Blanco: (Se detiene)

Rey Blanco: ¿Parece una ilusión, o el que se aproxima es uno de los tuyos?

Peón Blanco: No es de los míos, es de los otros.

Rey Blanco: ¿Qué querrá?

Peón Blanco: Viene solo.

Rey Blanco: Puede ser una trampa. Avanza dos casillas.

Peón Blanco: Voy.

(Entra un peón negro con un maletín en mano)

Peón Negro: Esa posición no es válida. La e4 no puede ser ocupada sin un contrincante.

Rey Blanco: Da igual, ese va a ser mi movimiento, yo siempre comienzo por ley.

Peón Negro: Pero ya le dije que sin contrincante no se puede empezar.

Rey Blanco: ¿Por qué debería yo hacerle caso a un simple peón, que al igual que todos, no saben ni siquiera donde se encuentran?

Peón Blanco: Talvez sabe algo.

Rey Blanco: No sabe. Estos nunca saben nada.

Peón Negro: (Revisando el maletín) La partida se ha pospuesto.

Rey Blanco: ¿Por qué?

Peón Negro: ¿Dónde está la torre?

Rey Blanco: ¿Por qué?

Peón Negro: Ese era parte del acuerdo, según me dijo.

Rey Blanco: Yo tengo palabra.

Peón Negro: La partida depende de que la muestre.

Rey Blanco: Si no hay confianza se pospone la partida. Peón Negro: Pues se pospone. (Guarda el maletín. Yéndose) Rey Blanco: (Al peón blanco) Sáquela.

Peón Blanco: Voy.

Peón Negro: Tiene que entregármela.

Peón Blanco: No voy.

Rey Blanco: Sáquela.

Peón Blanco: Ya no divago, ya sé.

Rey Blanco: No sabe. Anda y tráela.

Peón Blanco: (Al peón negro) Qué haría siendo Rey y le sucediera…Rey Blanco: Está usted fuera de juicio. Peón Blanco: Usted está fuera de juicio. Rey Blanco: Basta ya.

Peón Blanco: Ya basta.

Rey Blanco: Le ordeno que se calle o lo mando a callar.

Peón Blanco: No depende de usted mandarme a callar. Mi trabajo es reclutar y yo puedo reclutar y decir a los míos que recluten, y tras la reclusión vendrá el silencio y después del silencio vendrá la libertad. (Al peón negro) Le decía. ¿Que haría usted si usted fuera Rey y tiene un alfil enemigo en la posición e4 y tiene a un hermano suyo en la posición e5? ¿Cómo detiene un jaque mate inmediato?

Peón Negro: Depende. Peón Blanco: Error. Piense. Peón Negro: No es posible. Rey Blanco: Error.

Peón Blanco: Error. Rey Blanco: ¿Error? Peón Blanco: Error.

Rey Blanco: ¿Error el error? ¿O simplemente error?

Peón Blanco: Error su error.

Rey Blanco: No, parece ser que es su error el que erra, ya que el error de su hermano es notable. Es claro que los dos estén equivocados pues son hermanos, contrarios, pero hermanos. El conocimiento que puedan ustedes dos adquirir no puede llegar a entender el nuestro, el nuestro es una dote de herencia. Mi hermano lo tiene, mi papá lo tuvo, mi abuelo también... He conocido de muchos de los nuestros que lo tienen. Vecinos del norte, del este, sur y oeste. Es más, todos lo tienen porque nuestra misión es una… La compartimos y nos pertenece. Sáquela.

Peón Blanco: Me niego.

Rey Blanco: Pues bien. Dejaría que el alfil en la posición e3 haga lo que tenga que hacer. Un rey se defiende poniendo de primero a los de la familia “dos”. Por consiguiente, si alguno pretendiese generar algún tipo de conflicto el resto de su familia se vería afectada. Qué mal, hay que pensar en los demás.

Peón Negro: En eso tiene razón. Los dos y siete. Rey Blanco: Claro, yo sé. (Al peón blanco) Sáquela. Peón Negro: No.

Rey Blanco: No puedo dejar que la partida se posponga.

Peón Negro: Ya se pospuso.

Rey Blanco: (Al peón blanco. Lo amenaza con el cuchillo) Sáquela.

Peón Blanco: Voy.

Peón Negro: Un momento. En nuestras casillas ya no había torres. Las cedimos y se fueron. Se las llevaron. Los caballos ya no son los mismos caballos, antes eran primos, ahora son desconocidos. Los alfiles se callan y gozan de algunos de nosotros. Shhhh…. Ya no hablan. Se perdieron en un momento de divagación. Los hermanos ya no tienen que ceder.

Rey Blanco: Por lo mismo. Le corresponde a usted aceptarla porque les hace falta.

Peón Negro: ¿Qué ganan?

Rey Blanco: ¿Le incumbe?

Peón Blanco: Me incumbe.

Rey Blanco: No le incumbe.

Peón Blanco: Es incumbencia de todos. ¿Qué se hacen las torres? (El rey le tira un pedazo de manzana al Peón Blanco)

Peón Negro: (el peón blanco come) Parece ser que hay un hermano de ellos que está sobre ellos, y como ellos están sobre nosotros… Estamos abajo. Podría ser, no por mucho. Peón Blanco: No comprendo.

Rey Blanco. Era de suponer la mente de ustedes siempre se encuentra distraída y por tal situación, nosotros nos tenemos que encargar de hacer las cosas que ustedes jamás podrían, por eso nos ponen allí.

Peón Blanco: Si estamos adelante, por qué ellos están sobre nosotros ¿no se supone que ellos están detrás de nosotros?

Peón Negro: Están tras nosotros.

Rey Blanco: Parece ser que usted tiene cierto conocimiento en las posiciones.

Peón Negro: Se logra en las luchas.

Rey Blanco: ¿Tiende usted siempre a hacer revueltas?

Peón Negro: Sólo por las cosas que lo ameritan, defendiendo lo nuestro.

Peón Blanco: ¿Por estrategia?

Rey Blanco: Por revoltosos. Cuando se hacen revueltas hay que hacer lo que la mente dicta, y si hay una piedra en tu zapato…

Peón Negro: (Al peón blanco) Pues debería reclutar y hacer toda una cantera dentro de estos zapatos.

Rey Blanco: Camine con cuidado. (Al peón blanco) Salte uno. Camine dos. Ahora camine tres.

Peón Negro: ¿Jaque?

Peón Blanco: La saco.

Peón Negro: El remedio es fácil para ustedes, somos piedras en zapatos sucios.

Rey Blanco: Salte uno a la izquierda.

Peón Blanco: Déjeme sacarla.

Peón Negro: No mató.

Rey Blanco: Salte.

Peón Blanco: (Al peón negro) Salte cuatro. Vamos, salte cuatro.

(El peón negro salta tres)

Peón Negro: Jaque.

Peón Blanco: No, jaque. Jaque Mate.

Peón Negro: Tengo que seguir las reglas.

Rey Blanco: Mate. (Le hunde el cuchillo en el estómago) “Nunca se debe decir cuando se está en jaque, si se avisa, el ataque tiene menor peso”. Ya no es necesario que saltes. (El peón blanco se queda inmóvil) ¿Qué harías si tienes a un caballo enemigo en la casilla g8 y tienes a un peón en la casilla f8?

Peón Blanco: ¿Qué haría usted?

Rey Blanco: Respóndame. (Pausa)

Peón Blanco: ¿Qué haría usted si tiene a un peón suyo en la casilla e2 y atrás de él hay un impostor que se hace pasar por un buen Rey? (El rey lo observa lúgubre) Este peón tiene hermanos en todas las casillas de los dos. Y este impostor llegó ahí porque nosotros lo pusimos ahí.

Rey Blanco: Me parece que haría una limpia.

Peón Blanco: Eso digo yo, hay que hacer una limpia (Gran pausa) ¿Qué piensa?

Rey Blanco: Nada. Simplemente divago en el no saber (Se va a ir) Voy a sacarla.

Peón Blanco: Salte seis. (El rey se queda inmóvil) Dije que salte seis. Hágalo. No es tan bonito hacer lo que se le pide, ¿no? Hágalo. (El peón camina uno hacia atrás) Salte seis. Seis.

Rey Blanco: Ya son las dieciocho.

Peón Blanco: Por lo mismo. Salte seis porque la partida ya hace un cuarto de hora comenzó (El peón salta cinco hacia atrás. Le saca el cuchillo al peón negro)

Rey Blanco: No es una salida viable.

Peón Blanco: ¿Entonces cuál? Ustedes hacen lo que quieren ¿y nosotros?

Rey Blanco: Hay que racionar. No se puede dejar todo a expensas de otros. La comisión es grande por callar lo que bien no sabe, pero por eso puede ser recompensado. Deje que el camino se siga trazando.

Peón Blanco: ¿Habla de compra en un momento como este? (El peón se vuelve hacia el Rey con el cuchillo cerca)

Rey Blanco: No es compra, es gratificación.

Peón Blanco: Tanto los vecinos del 2 como los del 7, del norte al sur y del este al oeste deberían saber que el poder es nuestro y no de otros.

Rey Blanco: No lo sabrían administrar.

Peón Blanco: ¿Ignorantes? (Toca con el cuchillo su espalda)Rey Blanco: ¿Jaque?

Peón Blanco: (Le hunde el cuchillo en la espalda) Mate. Ya no hay espacios para los tableros. Además, se acaban las torres. Cada vecino hermano sabrá que de nosotros es… Y de nosotros depende. Las torres son nuestras y no de algunos. (Recoge el tablero.) El color no debe marcar una división, puesto que en la división, los de atrás se aprovechan por el barullo del ajetreo. Mandan a uno de un color que se enfrenta a otro de los mismos en otro color, para su bien común individual. Con un poco de raciocinio, lo objetivo tiene más fuerza que una propuesta subjetiva. No solo de manzanas se vive. Adelante o atrás, este u oeste, el camino se debe trazar siempre hacia lo común. Un sentido que se pierde por la venda que nos hace divagar. (Se lleva al peón negro. Pausa)

Rey Blanco: Bien. ¿A qué hora fue pactada la partida? (Saca una manzana y un cuchillo y se la empieza a comer a pedazos)

Peón Blanco: A las cinco y cuarenta y cinco.

Rey Blanco: No entiendo el vulgo.

Peón Blanco: A las dieciocho menos quince.

Rey Blanco: Mucho mejor la matemática (le tira un pedazo de manzana mordida)

Peón Blanco: Razonable para los que saben. Para el que no sabe es como leer un periódico en otro idioma, lo que nos muestran las imágenes es con lo que nos quedamos. En operaciones como la adición y sustracción… (silencio)

Rey Blanco: ¿Qué quiere decir?

Rey Negro: Nada, simplemente divaga en el no saber.

Peón Blanco: Jaque.

FIN