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Temas de nuestra américa

e-ISSN: 2215-3896.
(Enero-Junio, 2023). Vol 39(74)
DOI: https://doi.org/10.15359/tdna.39-74.4
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e-Mail: temas@una.ac.cr
Licencia: CC BY NC SA 4.0

LITERATURA


Un estudio comparado de la voz femenina en la poesía del pueblo marginado del sur global

A comparative study of the female voice in the poetry of marginalized people from the global south

Um estudo comparativo da voz feminina na poesia dos povos marginalizados do sul global

Dr. Ashwani Kumar

Assistant Professor 

The English and Foreign Languages University

Hyderabad, India

ORCID: 0009-0007-1758-5219

Recibido: 07/04/2023 - Aceptado: 7/9/23


Resumen

El presente artículo examinará la literatura (poesía) de dos grupos marginados, los afrocaribeños en el Caribe y los dalits en la India. Se enfoca en demostrar cómo las dos colectividades diferentes, del Caribe y la India, están constituidas por estructuras de opresión socioeconómica, cultural y política que definen sus identidades en las respectivas sociedades. Mi intento sería examinar las voces de protesta que emergen en la poesía de mujeres afrocaribeñas, Nancy Morejón y Excilia Saldaña y las poetas dalits de hindi, Sushila Takabhore, Nirmala Putul, Anita Bharti, etc., que denuncian la discriminación con base en la casta en la India y la raza en el Caribe hispánico, que complican las identidades del pueblo marginado.

Se sabe que las mujeres afrocaribeñas y dalits están oprimidas en sus respectivas sociedades. Son víctimas de las cinco caras de la opresión. Intentaré reflexionar el problema siguiendo la teoría de cinco caras de opresión (pensadas por la científica política estadounidense Iris Marion Young), como la Explotación, la Marginación, la Impotencia, el Imperialismo cultural y la Violencia.

También exploraré cómo la teoría de la crítica india Gayatri Chakravorty Spivak (“¿Puede el subalterno hablar?”) en la que opina que el subalterno no puede hablar, está desafiada por las voces de los poetas dalits. Además, también se encuentra un debate entre Spivak y Roberto Fernández Retamar (Caliban) sobre ¿cómo debe adquirir su voz propia el subalterno? Con la lectura del libro Caliban y otros ensayos (1979) de Retamar, intentaré responder al argumento de Spivak de cómo deben usar el idioma los subalternos.

Palabras claves: Casta, marginalización, raza, resistencia, subalternidad, sur global

Abstract

This article delves into the authentic experiences of Afro-Caribbeans in the Hispanic Caribbean and Dalits in India, whose voices have risen as marginal literature on the global surface. The structures of socioeconomic, cultural, and political oppression that define their identities in their respective societies are examined, highlighting the protest poetry of Nancy Morejón and Excilia Saldaña in the Hispanic Caribbean, and Sushila Takabhore, Nirmala Putul, and Anita Bharti in India. These poets shed light on the discrimination based on race and caste that complicate the lives of those who are marginalized.

The oppression faced by Afro-Caribbean and Dalit women is explored, using the theory of five faces of oppression to theorize the problem. This theory, posited by Iris Marion Young, includes Exploitation, Marginalization, powerlessness, Cultural Imperialism, and Violence. The article also delves into the debate between Gayatri Chakravorty Spivak and Roberto Fernández Retamar (Caliban) about whether the subaltern can speak and how they can acquire their own voice. Retamar’s book, Caliban and other essays (1979), provides a response to Spivak’s argument about how the subaltern can use language to acquire a voice.

Keywords: Caste, global south, marginalization, oppression, race, resistance, subalternity

Resumo

O presente artigo examinará a literatura (poesia) de dois grupos marginalizados, os afro-caribenhos no Caribe e os dalits na Índia. Ele se concentra em demonstrar como as duas coletividades diferentes, caribenha e indiana, são constituídas por estruturas de opressão socioeconômica, cultural e política que definem suas identidades nas respectivas sociedades. Minha tentativa seria examinar as vozes de protesto que emergem na poesia das mulheres afro-caribenhas Nancy Morejón e Excilia Saldaña e das poetas hindus dalits Sushila Takabhore, Nirmala Putul, Anita Bharti, etc., que denunciam a discriminação baseada em castas na Índia e a discriminação baseada em raças no Caribe hispânico, que complicam as identidades das pessoas marginalizadas.

As mulheres afro-caribenhas e dalits são conhecidas por serem oprimidas em suas respectivas sociedades. Elas são vítimas das cinco faces da opressão. Tentarei refletir sobre o problema seguindo a teoria das cinco faces da opressão (criada pela cientista política americana Iris Marion Young), como exploração, marginalização, impotência, imperialismo cultural e violência.

Também explorarei como a teoria da crítica indiana Gayatri Chakravorty Spivak (“Can the Subaltern Speak?”) de que o subalterno não pode falar é desafiada pelas vozes dos poetas dalits. Além disso, há também um debate entre Spivak e Roberto Fernández Retamar (Caliban) sobre como o subalterno deve adquirir sua própria voz. Ao ler Caliban and other essays (1979), de Retamar, tentarei responder ao argumento de Spivak sobre como o subalterno deve usar a linguagem.

Palavras chave: Caste, global south, marginalization, oppression, race, resistance, subalternity

El presente artículo examinará de una manera comparada la condición socioeconómica de las mujeres dalits y afrocaribeñas y demostrará cómo las voces de protesta que emergen en la poesía de mujeres afrocaribeñas como Nancy Morejón y Excilia Saldaña y las poetas dalits de hindi Sushila Takabhore, Nirmala Putul, Rajni Tilak, Anita Bharti, etc., denuncian la discriminación con base en la clase, la raza, el género y la casta en la India y en el caribe hispánico.

Haremos uso de las discusiones y argumentaciones presentadas por la famosa cientista-política estadounidense Iris Marion Young sobre las cinco caras de opresión: la explotación, la marginación, la idea de la impotencia, el imperialismo cultural y la violencia.

El artículo también explorará cómo la teoría de Gayatri Chakravarti Spivak (“¿Puede el subalterno hablar?”) en la que opina que el subalterno no puede hablar, está desafiada por las voces de las poetas dalits y afrocaribeñas, a través de las literaturas respectivas.

Según Iris Marion Young, La explotación es el acto de usar el trabajo de las personas para producir ganancias sin compensarles de manera justa.

La marginación es un proceso de exclusión del pueblo de todo tipo de servicio.

La idea de la impotencia se vincula a la teoría del socialismo de Marx: hay quienes “tienen” poder, mientras que otros “no lo tienen”. Los que no tienen poder están dominados por la clase dominante y deben recibir órdenes y casi nunca tienen derecho a dar órdenes ni a decidir.

El imperialismo cultural implica el tomar la cultura de la clase dominante y establecerla como la norma. Los estereotipos son las formas más comunes que utiliza el imperialismo cultural.

La violencia es probablemente la forma más obvia y visible de la opresión (Young, 1990: 48-63).

Estas cinco caras de la opresión también están vinculadas con la vida de las mujeres dalits en India y las mujeres afrocaribeñas en el Caribe.

Las mujeres dalits son oprimidas en la sociedad india, dominada por la religión hindú; su estatus en el eslabón más bajo de la sociedad les quita todos los derechos.

Según Manusmriti, el libro religioso indio, “las mujeres tienen que estar bajo el control de sus padres en la infancia, sus maridos en la edad adulta, y de sus hijos en la vejez, y no tienen una existencia independiente más allá de estos roles, en relación con los hombres”. 1

Además, las mujeres dalits padecen triple discriminación: por la casta, el género y la clase. Por su casta se les considera intocables e impuras, ellas enfrentan discriminación de género, y son las que realizan las labores domésticas, agrícolas, labores detestables como limpiar la letrina, barrer, etc., y no reciben nada por sus trabajos duros, de ahí que posean el estatus económico más bajo en la sociedad. Además, tienen casas fuera de los pueblos, en las zonas rurales, y tienen que llevar un lenguaje corporal sumiso, cuidar a la familia, no pueden entrar a los templos, hasta hace poco tiempo no podían cubrir la parte superior de su cuerpo en el sur de India etc…, además, las niñas y las mujeres dalits son víctimas de la violencia sexual, trata de personas, y la practica cultural abusiva como devdasis2, etc., y otras formas de violencia. Esto les sucede a las mujeres y niñas todos los días.

Un historiador indio, Ghanshyam Shah señala: “La violencia contra las mujeres dalits es la técnica adoptada por las castas dominantes para reforzar su poder y hacer valer su estado superior establecido”.

De igual manera, las mujeres afrocaribeñas fueron traídas como esclavas para trabajar en las colonias en condiciones miserables y fueron víctimas de todo tipo de opresión.

Al respecto, el destacado sociólogo peruano, Aníbal Quijano dice:

La idea de raza ha demostrado ser el más eficaz y perdurable instrumento de dominación social universal. La introducción en los territorios americanos y caribeños de los grupos humanos esclavizados, provenientes de África, trajo consecuencias específicas para las mujeres. Estas llegaron en cantidades menores que los hombres, fueron explotadas sexualmente por sus congéneres y por los conquistadores, lo que las convirtió en objetos sexuales y de reproducción de mano de obra.

Más adelante el señala que los hombres y mujeres blancos tienen una situación favorecida en la escala socio-económica y política, sobre las mujeres en general y sobre las mujeres afrodescendientes en particular. Esto señala que también son víctimas de la triple discriminación. (CEPAL, 2018: 15-18)

Según CEPAL (Mujeres Afrodescendientes en América Latina y el Caribe), “la presencia de mujeres negras y mestizas es mayor en el trabajo informal y el trabajo no remunerado. La explotación de las mujeres afro-caribeñas tiene que ver con la condición miserable de su vida que se refiere igualmente a la explotación sexual y a la violencia material y simbólica” (CEPAL, 2018: 16).

Acerca del estereotipo, la destacada teórica argentina, María Lugones indica,

Históricamente, en Occidente, solo las mujeres burguesas blancas han sido contadas como mujeres: las hembras excluidas pro y en esa descripción no eran solamente sus subordinadas, sino que se las veía y trataba como animales, marcadas sexualmente como hembras, pero sin las características de la femineidad. (CEPAL, 2018: 16)

Así que, está claro que los pueblos subalternos del sur global todavía poseen una condición precaria en sus sociedades y son víctimas de todo tipo de opresión. Las poetas bajo estudio son portavoces de sus respectivas comunidades que, a través de su poesía, resisten contra todo tipo de opresión.

En la actualidad la literatura dalit de hindi escrita por las mujeres está atrayendo mucha atención del público. Las poetas dalits de hoy alzan las voces de protesta y se defienden negándose a ser esclavas de los hombres de castas superiores. Las poetas dalits de hindi como Sushila Takabhore, Nirmala Putul, Rajni Tilak, Anita Bharti, etc…, son las autoras más destacadas de la literatura dalit escrita por las mujeres en la lengua hindi. La lengua más hablada del país.

El trabajo detestable, la pobreza, el hambre son los problemas graves de los dalits, que señala el siguiente poema ‘Inocentes’ de una poeta dalit Anita Bharti:

“……………………

Chandro sale

a barrer con la caja en la mano

dejando atrás

a sus hijos inocentes Pinky, Babli, Chhotu (nombres de los niños)

que están durmiendo abrazados.

Cuando los tres se despierten

al no encontrar a la madre

llorarán y se pelearán

comerán del cuenco un trozo de pan duro.

Chandro limpiará las calles con una escoba

arrojará orina maloliente

Recogerá la cesta llena

y la arrojará en algún lugar lejano...

Ella volverá llena de sudor

se limpiará

se lavará las manos y la cara

y solo entonces conseguirá el té con un trozo de pan seco.

volverá a la chabola

con la escoba y la cesta

donde sus pequeños inocentes luchan contra el hambre

lloran

y duermen como un bulto.”3 (La traducción es mía)

Además de la pobreza, hay tantos grilletes en la sociedad que no le dejan salir adelante y aguanta el dolor y la tristeza. Las mujeres dalits se mantienen separadas de todos los aspectos de la sociedad. Anita Bharti dice lo mismo en su poema ‘Tierra’:

“Siempre hicieron lo mismo

disfrutaron de sus derechos

y sobre los derechos de los demás

impulsaron prohibiciones

no nos dejan ir por el camino

no nos dejan vestir bien

tampoco nos dejan estudiar

simplemente nos hacen quedar en celdas sucias.”4 (La traducción es mía)


Hay demasiadas restricciones institucionalizadas en la praxis social por la sociedad brahmánica en nombre de las escrituras sagradas, la religión, etc., que actúan contra ellas. Se siente impotente en el entorno que ha sido creado para dominarla y controlarla. Se las considera tan impuras que ni siquiera pueden entrar a los templos. Pero, cada vez que quieren hablar de su existencia la sociedad, dominada por hombres, las reprime con violencia para mantener la supremacía.

Pero la mujer dalit de hoy no se va a quedar callada después de ver o sufrir injusticia, sino que ha aprendido a dar una respuesta adecuada a la injusticia. La otra poeta dalit Sushila Takbhore señala en un poema:

“El uso de mi cuerpo

y el abuso de mi cuerpo

ya no aguanto más

yo he sido la víctima

pero ya no más.” (Takbhore, 2005: 78-69) (La traducción es mía)


Los ecos inquietantes del pasado represivo han acentuado la necesidad de romper el molde restrictivo. Sin embargo, las experiencias individuales compartidas por la poeta se extienden a toda la comunidad, es una voz colectiva. Las poetas rechazan el lenguaje rítmico y florido, su lengua es bastante afilada, con la que luchan contra la opresión castista. Con tal afán, Sushila Takbhore cuestiona a los opresores:

“Somos Dalits

en forma de seres humanos

queríamos preguntar en el idioma civilizado.

¿Cuál es la historia de la civilización y la cultura humana?

¿Cuál es la base de la cultura india?

¿Por qué nos torturan hasta ahora?(Takbhore, 1994: 87) (La traducción es mía)


La forma de interrogación de dicho poema nos lleva a otra referencia muy importante que, por un lado, parece muy adecuada, y, por otro, nos hace reflexionar y adelantar el debate constituido por ello. Me refiero a la discusión de los estudios subalternos tan prevalentes en el sudeste de Asia, el conocido artículo de Gayatri Spivak titulado ¿Puede hablar el subalterno? (¿Can the Subaltern speak?). La opinión de Spivak es que el subalterno no puede hablar, ya que tan pronto como él intente adquirir la voz, tiene que apoyarse en el discurso dominante para que se le entienda. A consecuencia, se ve obligado a usar el mismo discurso dominante que entonces no le aparta de lo que ella/él quiere apartarse. Ahora bien, la pregunta que se debe hacer está más bien relacionada con otra pregunta­ – ¿Cómo debe adquirir su voz propia el subalterno? A mi parecer, se puede encontrar la respuesta a esto en el debate acerca de Calibán y su posición vis a vis Próspero. Roberto Fernández Retamar, en su reconocido libro Calibán y otros ensayos (1969) lo responde con otra pregunta: ¿qué otro lenguaje puede usar Calibán si este es el único que él sabe? Así, los marginados han aprendido el lenguaje de subversión, aunque hablan en el mismo lenguaje, el contenido de sus textos es lo que les diferencia de los de la gente del centro. Las mujeres Dalits han decidido romper los códigos culturales establecidos y los estereotipos; primero el de no hablar y no decir nada en contra de las castas opresoras. Los oprimidos no solo están alzando su voz, sino que hacen preguntas como un contraataque que demuestra que son capaces de pelear por su espacio en la sociedad india y afrocaribeña. De esta manera, me pregunto ¿si sigue siendo vigente la propuesta de Spivak o acaso debe ser planteada de otra manera?

La poeta india Ramanika Gupta, dice lo mismo:

Pero ya han empezado a hablar

han empezado a decir que

tienen hambre y necesitan comer

tienen sed y necesitan agua

están golpeados y reconocen el palo

ellos ya han empezado a hablar.” (Gupta, 1997: 47) (La traducción es mía)

Es evidente que los Dalits están levantando la voz contra los opresores que establecen ciertas reglas y códigos para controlarlos.

Al otro lado, en el caribe hispánico hubo intentos de combatir la condición de las mujeres afrocaribeñas, en la segunda mitad del siglo XX, con el movimiento negrismo. Las poetas cubanas Nancy Morejón y Excilia Saldaña comenzaron a levantar las voces de protesta y afirmar su dignidad e identidad en la sociedad respectiva.

Nancy Morejón en su poema Mujer Negra representa todos los tipos de opresión, incluso la resistencia contra los opresores.

El cuerpo de las esclavas sufrió una explotación tremenda en mano de los amos blancos, que les cuesta olvidarla. El poema Mujer Negra señala:

“Todavía huelo la espuma del mar que me hicieron atravesar.

Pero, no olvido el primer alcatraz que divisé”.


La condición de las mujeres afrocaribeñas era peor que la de los animales, ya que se les obligaba a trabajar bajo condiciones miserables. La explotación de mano de obra era una opresión común entre los afrocaribeños.

“Me dejaron aquí y aquí he vivido.

Y porque trabajé como bestia, aquí volví a nacer.

El dominio del blanco sobre el cuerpo de los afrocaribeños era tan fuerte que los controlaban según su deseo. Se les vendía o compraba como animales y les impedían trabajar según sus ideales. Este acto inhumano se empeoraba con la explotación sexual de las mujeres. La opresión sexual de las esclavas por los amos blancos era para mostrar su superioridad patriarcal y racial, que sigue en pie hasta el tiempo de hoy. La poeta sigue:

“Su merced me compró en una plaza.

Bordé las casacas de su Merced y un hijo le parí.

Mi hijo no tuvo nombre.”


Esto indica que, como la mujer negra era esclava de su amo blanco, tenía que hacer todas las tareas determinadas, como los trabajos caseros, la esclavitud sexual etc…, ya que era una mujer pobre, trabajaba en los campos, y no tenía una buena vivienda. Dice:

“Sembré, pero la cosecha no recolecté,

Vivían en un barracón que ella misma construyó.”


Es sabido que, el pueblo afrocaribeño estaba obligado a vivir en las zonas separadas. Pero el verso “pero canté al natural compás de los pájaros nacionales” nos señala que el poder del amo no era absoluto, porque ella siempre tenía la esperanza, y resistió por una vida digna. Todo este padecimiento que ha sufrido la mujer afro-caribeña, la vuelve rebelde.

Me rebelé…

Me sublevé.”5


Luego, Morejón vuelve a hablar de una identidad más inclusiva. Una identidad que se extiende para incluir a todo el pueblo marginado; hacia una identidad más colectiva. No solo usa ‘yo’ sino que va más allá y usa ‘nosotros’ para asimilar a toda la comunidad cubana. Lo hace no solo para echar la mana humanitaria, sino que para levantar la conciencia del pueblo subalterno.

Por el otro lado, la otra poeta conocida cubana Excilia Saldana explora la relevancia del género y raza en su poesía.

Un buen ejemplo es su poema ‘Monólogo de la esposa’ del libro Mi nombre (2003). Cabe señalar que, al igual que la poesía de Morejón, este poema también es la representación de lo personal y lo colectivo. Además, este poema es un ejemplo importante de la violencia sexual contra las mujeres afrocaribeñas. Ya que fue víctima de la violencia sexual por su propio padre, resulta ser un poema de carácter autobiográfico. Por lo tanto, ella levanta su voz rebelde en este poema:

“Soy yo. La esposa.

Del rincón de la sangre vuelvo.

Allí encontraré a mi padre

En una tarde de juegos:

Que no es mulato, dice,

Sino gitano de baile flamenco.

……………..

Y me saca el padre

Y me da la vuelta

Y me gira en el humo

Y me cerca en la siesta.

En los vapores del ron,

La niña fue solo hembra.”
(Saldaña, 2003: 13-32)


La poeta indica que el dolor que ha sufrido la niña violada por su padre es parecido a los padecimientos que enfrentan las mujeres afrocaribeñas por la esclavitud. El padre, que estaba ausente en la memoria de la poeta hasta entonces, aparece como un mulato que quiere pasar por bailador de flamenco gitano. En este poema, al desplazar la figura del padre negro y reemplazarlo por la del español, la poeta centra la experiencia personal en el contexto de la historia caribeña. Esta voz rebelde de la poeta sigue vigente hasta el tiempo actual, ya que todavía las mujeres afrocaribeñas son víctimas de todo tipo de opresión.

Para concluir, se puede ver cómo las mujeres dalits y afrocaribeñas han sido o siguen siendo víctimas de todo tipo de opresión. Pero Foucault dice que…,”donde hay opresión también hay resistencia”. Ahora las voces del pueblo subalterno, a través de los movimientos literarios de la literatura dalit en India y el negrismo en el Caribe hispanófono, afirman su existencia y sus derechos humanos en las regiones respectivas.

Esta conexión sur-sur puede salvar la distancia entre los dos grupos de mujeres y brindarles una plataforma para crear sueños sociales. Les permitirá compartir sus dolores y potencialidades, miedos, angustias, alegrías y motivaciones en su lucha por la justicia social.

Referencias

CEPAL. (2018). Mujeres afrodescendientes en América Latina y el Caribe: deudas de igualdad. Publicación de las Naciones Unidas LC/TS.2018/33, julio de 2018.

Gupta, Ramanika. Aab Murakh Nahi Banenge Hum, Delhi: Abhiruchi Prakashan. (1997).

Saldaña, Excilia. (2003). Mi Nombre, Ediciones Unión, Cuba, 2003.

Takbhore, Shushila. (2005). El sol de nuestra parte, Swaraj Prakashan, New Delhi.

Takbhore, Shushila. (1994). También sabedlo esto, Sharad Publication, Nagpur.

Young, Iris Marion. (1990). Justice and politics of difference, Princeton University Press.

Enlaces consultados

https://www.legalserviceindia.com/legal/article-9786-manu-s-laws-and-social-order.html consultado el 27/3/23.

http://kavitakosh.org/kk/%E0%A4%A E%E0%A4%BE%E0%A4%B8%E0 %A5%82%E0%A4%AE_/_%E0%A4%85%E0%A4%A8%E0% A4%BF%E0%A4%A4%E0%A4%BE_%E0%A4%AD%E0% A4%BE%E0%A4%B0%E0 %A4%A4%E0%A5%80 consultado el 26/3/23.

http://kavitakosh.org/kk/%E0%A4%AE%E0%A4%BF%E0%A4%9F%E0%A5%8D%E0%A4%9F%E0%A5%80_/_%E0%A4%85%E0%A4%A8%E0%A4%BF%E0%A4%A4%E0%A4%BE_%E0%A4%A D%E0%A4%BE%E0%A4%B0%E0%A4%A4%E0%A5%80 consultado el 25/3/23.

https://negracubanateniaqueser.com/somos-negras-cubanas/mujer-negra-de-nancy-morejon/ consultado el 27/3/23.


2 El sistema Devadasi se practica en varias partes de la India, según el cual una joven es devota y se casa con una deidad antes de llegar a la pubertad. Luego actúa como cuidadora del templo y la deidad a la que se ha dedicado. Últimamente, esta práctica se ha utilizado para empujar a las niñas a la prostitución.

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