Revista Electrónica Educare (Educare Electronic Journal) EISSN: 1409-4258 Vol. 22(2) MAYO-AGOSTO, 2018: 1-25

doi: http://dx.doi.org/10.15359/ree.22-2.11

URL: http://www.una.ac.cr/educare

CORREO: educare@una.cr

[Cierre de edición el 01 de mayo del 2018]


Criterios de empleabilidad en la educación técnico-profesional. Tensiones y retos en la especialidad salud, Araucanía, Chile

Criteria for Employability in Professional Technical Education. Tensions and Challenges in Health Specialty, Araucanía, Chile

Critérios de empregabilidade no ensino técnico profissional. Tensões e desafios no tema da saúde, Araucanía, Chile

Hernán Riquelme-Brevis1

Universidad Arturo Prat

Temuco, Chile

h.riquelmebrevis@gmail.com

http://orcid.org/0000-0002-9686-6284


Maira Rivas-Burgos2

Consultora independiente

Temuco, Chile

m.rivas.burgos@gmail.com

http://orcid.org/0000-0002-9769-6280


Matías Riquelme-Brevis3

Universidad de la Frontera

Observatorio de Medios y Movimientos Sociales

Temuco, Chile

matiasriquelmeb@gmail.com

http://orcid.org/0000-0001-6410-9265


Recibido • Received • Recebido: 26 / 03 / 2017

Corregido • Revised • Revisado: 12 / 02 / 2018

Aceptado • Accepted • Aprovado: 02 / 04 / 2018

Resumen: La presente investigación analiza los criterios de empleabilidad que priman al momento de contar con los servicios profesionales de personas tituladas de tres liceos técnicos con especialidad en enfermería de La Araucanía, Chile. Mediante la utilización de una metodología mixta, se estableció contacto tanto con entes empleadores de la salud del ámbito público y privado como con docentes, personas tituladas y estudiantes de los tres liceos pesquisados. Se aplicaron diversas técnicas de investigación como cuestionarios, entrevistas en profundidad y grupos focales. Dentro de los principales resultados, cabe destacar la rearticulación que experimenta la Educación Media Técnico Profesional chilena en relación con la sociedad civil y el sistema de salud; la necesidad de reforzar los espacios de diálogo entre las diversas instituciones que conforman el sistema educativo-sanitario; el perfeccionamiento técnico y el desarrollo de capacidades socioemocionales a las cuales se enfrentan los sujetos participantes de la investigación y una creciente demanda por avanzar en la validación social de personal técnico profesional del área de la salud. Finalmente, cabe señalar que, a través de las evidencias encontradas, se pretende aportar tanto en la generación de mecanismos que optimicen el desempeño laboral del personal técnico de la salud como en la detección de barreras que merman el desarrollo de la educación técnica de nivel medio en el país.

Palabras claves: Empleabilidad; educación técnico-profesional; enfermería; mercado laboral.

Abstract: The present research analyzes the employability criteria, when hiring the services of nursery graduates from three secondary technical schools in La Araucanía, Chile. This research project used a mixed methodology, so it was possible to contact health employees from public and private areas, such as teachers, graduates and students from three secondary technical schools and apply to them various research techniques such as questionnaires, in-depth interviews, and focus groups. Among the main results, it is worth mentioning: the re-articulation experienced by the technical and professional high schools in Chile, related to civil society and health system; the need to reinforce the dialog among institutions in the health and sanitary system; technical training and development of socio-emotional abilities of students and research graduates, and finally the demand to advance towards social validity of professional technicians in the health area. Finally, this research aims to contribute to finding mechanisms to improve the work performance of health technicians, as well as identifying obstacles that impede the development of secondary technical education in the country.

Keywords: Employability; technical-professional education; nursing; job market.

Resumo: Esta pesquisa analisa os critérios de empregabilidade que prevalecem quando existe a necessidade dos serviços profissionais de pessoas formadas, provenientes de três colégios técnicos especializados em enfermagem, em Araucanía, Chile. Usando uma metodologia mista, foi realizado o contato tanto com os trabalhadores da área de saúde pública como do setor privado, professores, pessoas formadas e estudantes dos três colégios pesquisados. A pesquisa foi feita mediante a aplicação de várias técnicas, tais como questionários, entrevistas e grupos focais. Entre os principais resultados encontrados, destacam-se a rearticulação em fase experimental, que está passando o ensino técnico profissional do Chile, relacionado com a sociedade civil e o sistema de saúde; a necessidade de reforçar as oportunidades de diálogo entre as diversas instituições que englobam o sistema de ensino e o Serviço sanitário; aprimoramento técnico e desenvolvimento de capacidades emocionais que os participantes da pesquisa devem desenvolver, e uma procura crescente para avançar na validação social de profissionais técnicos na área da saúde. Finalmente, através da evidência encontrada, este estudo apresenta a possibilidade de ajudar tanto na geração de mecanismos que aumentem o desempenho profissional de pessoas técnicas na área da saúde, como na detecção das barreiras que dificultam o desenvolvimento do ensino técnico em todo o país.

Palavras-chave: Empregabilidade; ensino técnico e profissional; enfermagem; mercado laboral.

Introducción4

En la sociedad chilena se conoce, por parte de las instituciones relacionadas con la educación, la importancia de aumentar la capacidad en áreas como innovación, tecnología y ciencia. Una de las posibilidades para avanzar en ello es contar con personal altamente calificado, por lo cual, una vía para aumentar la productividad se relaciona con el progreso en los niveles educacionales de la población, lo cual entregaría mejores alternativas laborales y mayor calidad productiva.

Resulta de suma relevancia considerar diversos esfuerzos políticos realizados en el último tiempo que tienen por objetivo incentivar la transición laboral de jóvenes, como también las tareas pendientes que apuntan a mejorar la competitividad y empleabilidad del país a través de la promoción del crecimiento económico y del desarrollo social de manera armónica. Por empleabilidad, como concepto complejo y multidimensional, comprendemos la obtención de empleo por cuenta ajena, lo cual se explica por diversas competencias que posee un sujeto y que le permiten satisfacer sus necesidades económicas y profesionales (Suárez, 2016).

La educación media técnico profesional (EMTP) promueve la transición de jóvenes desde el sistema educativo al mercado del trabajo; para esto, incorpora modalidades de enseñanza que combinan aprendizaje teórico y práctico que entreguen la posibilidad de adquirir competencias específicas para desempeñarse adecuadamente en diversos sectores del sistema económico. A modo de antecedente, cabe destacar que en el año 2008 se constituyó una comisión externa, la cual tuvo por finalidad elaborar propuestas para fortalecer la educación técnica profesional, instancia que puede considerarse un hito respecto al interés político gubernamental por la educación de nivel medio (MINEDUC, 2015a).

La presente investigación se articula en relación con la especialidad en atención de enfermería proveniente del sector salud, de un total de 355 especialidades ofertadas en el territorio nacional. En términos específicos se analizan aspectos socioemocionales, técnicos y estructurales que influyen en las posibilidades de empleabilidad de personal técnico de nivel medio provenientes de tres liceos de la Provincia de Malleco, Región de La Araucanía, Chile. Para ello, fue de alta importancia considerar la opinión de los principales sujetos involucrados en la problemática, lo cual conllevó a desplegar una batería metodológica que tuvo por finalidad recolectar información tanto en los lugares de trabajo del personal técnico de la salud como en los establecimientos educacionales de enseñanza media donde recibieron formación.

La estructura de la investigación integra cinco secciones. En la primera, se contextualiza la situación nacional y regional de la EMTP durante los últimos años. En la segunda se genera una discusión teórica a partir de los conceptos fundamentales de la investigación. En la tercera sección se presenta la metodología utilizada en la investigación. En la cuarta sección se presentan los resultados obtenidos. Finalmente, se entregan comentarios de cierre que permiten obtener una perspectiva general de la problemática.

Contextualización de la EMTP en Chile

En Chile, 4 de cada 10 jóvenes eligen un establecimiento de EMTP para completar su educación obligatoria (MINEDUC, 2015b). A lo largo del territorio nacional, son 949 los establecimientos que imparten EMTP. Con un total de 296.596 estudiantado matriculado (MINEDUC, 2015b). La Tabla 1 exhibe la distribución de matrículas y establecimientos a nivel nacional.

Tabla 1: Matrículas y establecimientos según dependencia administrativa nacional

Nota: Elaboración propia, con datos de MINEDUC (2015a).

En la Región de La Araucanía, son 78 los establecimientos que imparten EMTP; cada uno contempla más de una rama educacional. Los antecedentes entregados por el Ministerio de Educación (MINEDUC) para el año 2014, respecto al número de establecimientos y matrículas para 3º y 4 º medio por rama educacional, establecen las cifras contenidas en la Tabla 2. Cabe mencionar que el total de estudiantado matriculado en establecimientos de EMTP en 2014 fue de 23.308. Del total mencionado, 12.001 correspondía a matrículas de 3º y 4 º medio.

Tabla 2: Matrículas 3º y 4 º medio, y establecimientos según rama educacional a nivel regional. Año 2014

Nota: Elaboración propia, con datos de MINEDUC (2014).

Datos más actualizados indican que en 2015 la Región de La Araucanía contaba con 22.250 estudiantes en establecimientos de EMTP, cifra que representaban el 8% del total nacional. De esta manera, es posible establecer que existió una baja en el número de matrículas a nivel regional. A continuación, la Tabla 3 muestra las cifras de matrículas de jóvenes de EMTP por región.

Tabla 3: Matrículas de jóvenes EMTP

Nota: Elaboración propia, con datos obtenidos vía plataforma de transparencia (MINEDUC, s. f.).

Son 35 las áreas de especialización de EMTP impartidas a nivel nacional, con 17 menciones que se desprenden de los 15 sectores económicos del país (MINEDUC, 2013a). A nivel regional, son 29 las especialidades impartidas; destacan, en relación con la cantidad de establecimientos de EMTP que las entregan: Administración, Atención de Párvulos, Servicios de Alimentación Colectiva, Atención de Enfermería, Mecánica Automotriz, Electricidad y Agropecuaria. Lo anterior, tiene directa relación con el número de matrícula en EMTP de 3º y 4º medio, ya que entre las especialidades más demandadas en La Araucanía se presentan aquellas que provienen de los sectores económicos Administración, Metalmecánica, Alimentos, Programas y Proyectos Sociales, Electricidad y Agropecuario (MINEDUC, 2015a).

Sin lugar a duda, la EMTP en La Araucanía continúa validándose profesionalmente en rubros específicos, más aún, cuando la demanda por profesiones técnicas suele ir en aumento (MINEDUC, s. f.), ante ello la EMTP puede fortalecerse como un mecanismo de inserción laboral validado por diversas instituciones privadas y públicas.

La salud desde una perspectiva educativa

Inserción laboral y transformaciones estructurales

La empleabilidad, concepto formulado a principios del siglo XX, encuentra directa relación con las cualidades y competencias individuales respecto a las posibilidades de inmersión y estabilidad en el mercado laboral (Mallado, Parejo y Bozal, 2016). Para Mallado et al. (2016), priman factores personales como capacidad de adaptación, iniciativa o flexibilidad, por sobre factores de tipo social como sexo, edad o credo al momento de emplear a un sujeto. En una línea similar, Formichella y London (2012) sostienen que la empleabilidad abarca diversos campos difíciles de cuantificar, por ende, resaltan actitudes y cualidades que inciden en la obtención y conservación de un empleo por sobre un trabajo específico en un tiempo determinado.

En suma, factores sociales como el nivel educativo y procesos de socialización, condicionan la empleabilidad de los sujetos. En tal sentido, para Formichella y London (2012):

El concepto de empleabilidad incluye factores tangibles e intangibles, acentuando la característica actitudinal del individuo. Estas características actitudinales se manifiestan desde la propia infancia del individuo, generando un círculo de retroalimentación positiva durante su desempeño escolar. De esta forma, cobra importancia el ambiente en el que el individuo crece y estudia. (p. 84)

La empleabilidad, fuertemente influenciada por las capacidades y habilidades de los sujetos, posibilita el desarrollo integral con base en la trayectoria de vida marcada por el ciclo educativo, redes sociales y capital económico contraído, donde afloran diversas desigualdades que inciden en que unos tengan más posibilidades de emplearse que otros.

En América Latina, existen dos momentos relevantes en lo que respecta a la formación para el mundo del trabajo (Sepúlveda, 2016; Vera y Castioni, 2010). El primero comienza a mediados del siglo XX y se extiende hasta la década de los setenta, en este periodo se preparó mano de obra para actividades productivas a partir de institutos de formación profesional, ello evidencia, en parte, el afán por avanzar en la generación de técnicas que permitan acelerar la productividad. El segundo periodo, que comprende la década de los ochenta hasta la actualidad, se relaciona con el ímpetu globalizador en torno a la promoción de tecnologías y reestructuración del mercado laboral. Para Sepúlveda (2016), en este periodo, “se verifica, de manera mucho más evidente, la incorporación de la formación para el trabajo en la educación formal y el desarrollo de la educación técnica vocacional como un componente al interior del sistema educativo de los distintos países” (p. 4).

En la actualidad, se detectó, en la incipiente bibliografía sobre la temática (Castro y Orellana, 2010; Gaete y Morales, 2011; Larragaña, Cabezas y Dussaillant, 2014; Sevilla, Farías y Weintraub, 2014), la existencia de una articulación deficiente en planos como la continuidad de estudios, programas curriculares, carga académica, etc., lo cual impacta directamente en la generación de canales de comunicación con la sociedad e inserción laboral deficientes para el estudiantado una vez titulado. Con el objetivo de considerar la articulación como un proceso íntegro, genérico y analítico, se comparte la definición de Sevilla et al. (2014), la cual refiere a “la conjunción de elementos curriculares, pedagógicos, institucionales y culturales que propician el tránsito eficiente y exitoso hacia la educación superior de estudiantes egresados de programas técnicos escolares(p. 89). Dentro de los factores que promueven la desarticulación, Sevilla et al. (2014) identifica de los de tipo estructural, cultural, curricular, económico y de gestión.

De esta forma, cuando existen indicadores históricos en torno a la desarticulación, las barreras se exacerban e impactan tanto a nivel cognitivo como programático, en tal sentido, Sepúlveda (2009) identifica tres procesos significativos respecto a las transformaciones experimentadas en la EMTP chilena durante el periodo 1960-1999.

-Década de los 60: fuertemente influenciada por la reforma educativa, lo que supuso el incremento de la mano de obra especializada con énfasis en el sector industrial. Se define su duración en un ciclo de 4 años, con orientación, según Sepúlveda (2009):

A la entrega de conocimientos y habilidades suficientes para permitir la continuidad de estudios superiores, y planes específicos de cada especialidad desarrollados de manera secuencial y sobre la base de una opción de especialidad al comienzo del segundo año de nivel medio. (p. 14)

-Década de los ochenta: se establece la implementación de una educación diferenciada en un nuevo ciclo de enseñanza media, que genera una autonomía de los establecimientos para elegir libremente los programas de estudio. Para Sepúlveda (2009), la década de los ochenta se caracteriza de la siguiente manera:

La formación EMTP resultaba sobredimensionada e ineficiente para dar respuesta a las transformaciones económicas de la época, mayormente orientada a la exportación de materias primas y con un fuerte decrecimiento de la producción industrial; de igual manera, se detectaban problemas estructurales del sistema, muchos de los cuales se proyectan hasta la actualidad, particularmente aquellos asociados a la calidad de la formación recibida por los estudiantes y la tendencia a la segmentación social y económica que el modelo formativo tiene como implícito. (p. 15)

Finalmente, la década de los noventa supone la implementación de una reforma en diversas áreas, para lo cual se presentaron tres áreas críticas. Destacan: desregulación de modalidad educativa, desconexión entre las especialidades ofertadas y el mundo productivo y debilidades en los centros educativos que entregaban la formación (Sepúlveda, 2009).

Atención en enfermería desde una perspectiva técnica

En Chile, la educación técnica es promovida por las instituciones del Estado como una forma válida de inserción laboral; no obstante, existen importantes inconexiones respecto a la continuidad de estudios superiores, las cuales se relacionan con las barreras de acceso que se encuentran a medida que se intenta convalidar estudios o ejercer profesionalmente. La primera paradoja encuentra relación con el déficit de especialistas en el área de la salud en Chile. Según la Subsecretaría de Redes Asistenciales, División de Gestión y Desarrollo de las Personas (2014), existe una deficiencia de 3795 personal médico especialista y subespecialista, a ello se le debe sumar la carencia de profesionales de enfermería que, según la Federación Nacional de Enfermeros de Chile (FENASENF, 2015), no alcanza el número de 115 mil enfermeras y enfermeros que debiesen existir, contando solo con 34 mil. Ante un panorama adverso desde una perspectiva cuantitativa, Milos, Larraín y Simonetti (2009) priorizan velar por la calidad de atención ante la falta de profesionales del área, en tal sentido propone un esquema basado en lo siguiente:

1) Asumir “el situs6 de enfermería” como modelo de división del trabajo y como estrategia para lograr universalidad en el reconocimiento y control de las acciones de enfermería. 2) Regular las formalidades de la delegación/ encargo dentro del situs. 3) Categorizar, provisoriamente, los servicios de la enfermera en servicios: productivos, asistenciales, productos intermedios, de coordinación y enlace, de apoyo a la tecnoestructura. 4) Estudiar otras categorías y modalidades de categorización de servicios. 5) Promover la reglamentación correspondiente. (p. 22)

La atención de enfermería constituye un servicio especializado que, tal como lo afirman Milos et al. (2009), pretende mejorar la calidad de vida de las personas que padecen alguna enfermedad. Dentro de las estrategias que apuntan a la optimización de los servicios ofrecidos, los cinco puntos presentados por la autora contribuyen a mejorar tanto el escenario de atención profesional como la calidad de vida de la ciudadanía. Las ciencias de la salud, como disciplinas que históricamente han contribuido en el desarrollo biopsicosocial de la humanidad (Rojo y García, 2000; Seguel, Valenzuela y Sanhueza, 2015), a nivel nacional presentan un déficit en cuanto a la cantidad de profesionales, no obstante, detectar la problemática para así programar la atención resulta un paso fundamental para mejorar el desempeño de profesionales del área, como también el trato y la atención a pacientes.

El cuidado y la enfermería

La enfermería, como disciplina orientada al cuidado (Agüero y Klijn, 2010), representa una actividad de apoyo mutuo entre profesional y paciente, de ello se derivan los servicios que deben prestarse con el objetivo de cumplir el esquema de Milos et al. (2009) y así garantizar una base mínima en la atención, sopesando la adversidad contractual en términos de profesionales al servicio de la población.

El cuidado, como actividad basal de la sociedad y con implicancias en lo social, biológico y familiar respecto a la producción social y reproducción doméstica (Jelin, 2000), refiere a un proceso que traspasa el rol cultural naturalizado en la mujer como artífice de esta actividad a las enfermeras y a los enfermeros como agentes expertos, con todo lo que ello conlleva (estudios, salarios y trabajo formal) en un área de experticia específica.

Los grupos profesionales del cuidado, reconocidos tradicionalmente tanto por sus cualidades técnicas como por el papel social que les ha sido asignado históricamente, son principalmente de enfermería y educación. Este reconocimiento supone una simbiosis en la comprensión de las problemáticas asociadas a la salud desde una perspectiva social y cultural, por consiguiente, una enfermedad no puede comprenderse únicamente atendiendo a lo biológico, puesto que el entorno sociocultural y las condiciones de vida de la población y del sujeto paciente adquieren la misma importancia en la atención a las necesidades particulares del sujeto (Rojo y García, 2000).

No obstante lo anterior, al existir categorías diferenciadoras intrínsecas entre los enfermeros y enfermeras producto de la presencia de profesionales del área con estudios universitarios, personal técnico en enfermería con estudios en CFT (Centro de Formación Técnica) y personal técnico en enfermería con estudios secundarios, la calidad y preparación de profesionales con menos años de estudio suele ponerse en discusión, tanto por el propio gremio como por la opinión pública, lo cual genera una situación de aislamiento y discontinuidad (Sepúlveda, 2009). Al respecto, Castro y Orellana (2010) identifican la desarticulación existente en el sistema educacional chileno desde la educación técnica, como una problemática basada en lo que respecta al sistema educacional y al mercado laboral. Según los estudios consultados, existe una carencia de continuidad en lo que respecta a la EMTP y la educación superior a partir de “la falta de reconocimiento por parte de la educación técnica superior de los aprendizajes logrados en la EMTP, pues no existe la institucionalidad que lo permita” (Castro y Orellana, 2010, p. 79).

Metodología y herramientas de investigación

Este estudio tuvo por objetivo analizar la percepción de entes empleadores, docentes, estudiantes y personas tituladas respecto a los criterios de empleabilidad de personal técnico de la salud de tres liceos de La Araucanía. En términos prácticos, participaron en la aplicación del cuestionario 120 personas empleadoras de diversas instituciones públicas y privadas de La Araucanía que, a la fecha de la aplicación del instrumento cuantitativo, contaban entre su personal con técnicos de educación media en enfermería de los tres liceos. También se contó para la fase cualitativa con la participación de 8 docentes de liceos que ofertan la especialidad, 8 estudiantes de la especialidad y 2 personas tituladas, para un total de 18 sujetos de estudio. Docentes, personas tituladas y estudiantes provienen de tres liceos de la Provincia de Malleco (Liceo Juanita Fernández, Complejo Educacional Collipulli y Liceo Gregorio Urrutia). Con docentes y estudiantes se trabajó en grupos focales; mientras que a los titulados se les aplicaron entrevistas en profundidad con el objetivo de indagar en dimensiones como capacidades técnicas, inserción al mercado laboral, labores realizadas y campo ocupacional.

El estudio es de raíz mixta, ya que combina y recolecta insumos provenientes de los enfoques cuantitativo y cualitativo, ello permitió triangular la información obtenida mediante la utilización de diversas metodologías. El objetivo de utilizar metodologías mixtas consiste en aumentar la capacidad de comprensión de problemáticas sociales, donde existen diversas concepciones de mundo. En la presente investigación se optó por un modelo exploratorio. Con el objetivo de integrar la información recabada, se optó por ampliar la perspectiva analítica y garantizar los resultados verbales y escritos mediante un proceso dinámico (Pereira, 2011).

La metodología mixta permite que discutan campos de estudios disimiles. Según Uribe, Covarrubias y Uribe (2009):

[En las ciencias sociales] el desarrollo de metodologías mixtas ha sido poco común … donde a partir de la tradición cientificista de las ciencias como la Sociología, la Antropología o la Historia, los académicos recurren a estrategias metodológicas cualitativas o cuantitativas, las que conciben y utilizan de manera independiente, ajena una a la otra. Son, incluso, implementadas como si una fuera mejor que la otra o, peor aún, como que si alguna de ellas fuera la que solamente produce. (p. 130)

Con el objetivo de aportar desde una visión integradora entre una y otra perspectiva, se optó por utilizar ambos enfoques metodológicos, para así contribuir en el desarrollo de metodologías mixtas.

Para el caso de la presente investigación, la utilización del método mixto se caracterizó por pasar de la fase cuantitativa a la fase cualitativa en la recolección de datos. El orden de cuantitativo a cualitativo responde a que en un primer momento se desarrolló la aplicación del cuestionario, para posteriormente iniciar la fase cualitativa mediante la aplicación de grupos focales y entrevistas. No obstante, hubo momentos donde los datos se recopilaron simultáneamente, logrando una integración de información que posteriormente conllevó a correlacionar e interpretar los resultados mediante la triangulación (Pereira, 2011).

Los liceos participantes del estudio ofrecen la especialidad Atención de Enfermería con Mención Adulto Mayor y Mención Enfermería. Según el MINEDUC (2013b), tanto la Mención Adulto Mayor como la Mención Enfermería promueven la inserción laboral en centros privados y públicos, centros comunitarios, municipios y programas sociales, logrando que al momento de egresar cada estudiante pueda realizar atención a pacientes, administración de productos farmacológicos, preparar instrumentos e insumos, realizar actividades de apoyo y atender diversas necesidades orientadas a la nutrición, recreación, rehabilitación e información.

Discusión y análisis de resultados

Procedimiento cuantitativo: La aplicación del cuestionario como herramienta de investigación social

Desde el enfoque cuantitativo, y con un intervalo de confianza del 90%, se aplicó un cuestionario a una muestra aleatoria de 120 sujetos empleadores que residen y trabajan en La Araucanía tanto en el sector público (88%) como en el sector privado (12%). Entre las características sociodemográficas destaca: 21 hombres y 99 mujeres, de 24 a 58 años y la totalidad de ellos trabajando a la fecha de aplicación del instrumento en algún centro de salud.

En términos temporales, la recogida de datos se realizó durante los meses de agosto y septiembre del año 2016. Para recoger los datos se construyó una encuesta que contenía módulos con preguntas dicotómicas, de puntaje, abiertas y escala de Likert. El cuestionario se construyó para ser aplicado a entes empleadores de personal técnico de nivel educacional medio en salud, para ello fue prioridad utilizar un lenguaje técnico propio del área de la salud, el cual permitiese profundizar en variables que determinaran los diversos niveles de empleabilidad que resaltan al momento de supervisar y evaluar el desempeño. Las principales variables con las cuales se construyó el cuestionario correspondieron a medir el nivel de ingresos, tipos de contratación, capacidades técnicas, competencias actitudinales y desempeño en el mercado laboral. Posterior a la aplicación del instrumento se procedió a realizar un análisis descriptivo con el programa SPSS.

El propósito de la aplicación del cuestionario fue conocer la percepción de los entes empleadores respecto al desempeño laboral del personal técnico de la salud. En consecuencia, se aplicó un cuestionario que contaba con 45 preguntas. Las características de las personas que conformaron la muestra se fundamentaron en los siguientes criterios:

a) Que a la fecha de aplicación del instrumento trabajaran en algún centro de salud o institución privada o pública vinculada a la salud en La Araucanía, supervisando a uno o más técnicos o técnicas de la salud con títulos de alguno de los tres liceos del estudio.

b) Que conociera el desempeño laboral del personal técnico de la salud, ya sea supervisando el trabajo realizado o que hubiese participado en su contratación.

c) Que tuviese al menos 3 meses de residir en la región.

Ya definidos los criterios, se conformó un equipo de trabajo con estudiantes de universidad y profesionales del área de la salud que aplicaron el cuestionario. Posterior a ello se sistematizó y analizó la información obtenida.

Para representar lo descrito, a continuación se exhiben algunos de los principales hallazgos de la fase cuantitativa de la investigación. La presentación de los resultados cuantitativos se distribuye en dos secciones: Mercado laboral de titulados de ETMP de La Araucanía con especialidad en enfermería y capacidades técnicas de titulados de ETMP de La Araucanía con especialidad en enfermería.

Mercado laboral

Como se mencionó anteriormente, en una primera parte se indagó respecto a las competencias y habilidades que visualizaban los entes empleadores en torno al personal técnico de la salud, en este sentido, resultó de suma importancia conocer la percepción del sector empleador respecto a cómo conciben la incorporación de personal técnico de la salud en su institución.

Para un 88% de los sujetos encuestados, la contratación de personal técnico es de forma permanente, lo cual se correlaciona con que un 47% de este reciba un salario que oscila entre $351.000 y $450.000, un 43% entre $251.000 y $350.000, un 5% con menos de $250.000, un 4% entre $451.000 y $551.000 y un 1% más de $551.0007. Para el 12% restante, la contratación es esporádica o lisa y llanamente en reemplazo por un tiempo específico.

Para conocer en detalle las motivaciones que impulsan la contratación del personal técnico de la salud, la Tabla 4 presenta información respecto a los factores que influyen en su contratación. Si bien la mayoría de las respuestas representa una visión favorable respecto a los enunciados propuestos, destaca entre el sector empleador una visión no necesariamente localista en torno a las preferencias por personal técnico formado en La Araucanía. Junto con ello, cabe señalar que el personal técnico es un grupo profesional que, producto de una formación que no ha alcanzado una elevada especialización, es altamente reemplazable en su lugar de trabajo, posicionándole como personal con rotación permanente.

Tabla 4: Mercado laboral

Nota: Elaboración propia.

Las vacantes laborales para personal técnico de la salud suelen ser reducidas y representan un espacio mínimo en comparación con la demanda de otras profesiones del área; ello genera que las solicitudes de trabajo sean mínimas en comparación con la cantidad de sujetos titulados. Según los entes empleadores, esto se produce por dos factores: El primero se relaciona con la existencia de una sensación de confusión respecto al nivel de validación de los estudios obtenidos, lo cual impacta en que, aunque se cuente con el personal profesional, la validación de este en el sistema de salud resulta engorrosa, por ende, los entes empleadores en algunas ocasiones rehúsan de la contratación de profesionales del área. La segunda encuentra relación con el bajo grado de cualificación alcanzado. Para los entes empleadores existen procedimientos técnicos que el personal técnico de la salud no maneja a la perfección: ello incide, directamente, en que su inserción en el mercado laboral se vea reducida.

Capacidades técnicas

Directamente relacionado con la sección anterior, las capacidades técnicas del estudiantado titulado técnico de nivel medio con especialidad en enfermería suele ser una temática polémica para los entes empleadores. Para la totalidad de los sujetos empleadores encuestados los aspectos técnicos resultan sumamente significativos para garantizar una correcta transición al mundo laboral. Aunque la Tabla 5 presenta, en términos generales, una evaluación positiva de las capacidades técnicas, la contraposición con los resultados encontrados se encuentra al momento de profundizar en el segmento que respondió de manera indecisa.

Tabla 5: Capacidades técnicas y éticas

Nota: Elaboración propia.

Para la totalidad de los enunciados propuestos, la opción “De acuerdo” presenta respuestas que sobrepasan el 43%, lo cual representa un correcto manejo técnico por parte del personal técnico de la salud al momento de proceder. Dentro de los principales comentarios que se detectaron para los entes empleadores que respondieron de manera indecisa (del 10% al 27%) o de manera negativa, las causantes de la respuesta se encontraron en la solicitud que se les realizó para plantear sugerencias que permitiesen mejorar los aspectos técnicos, entre las que destacan: bajo nivel de capacitación con un 14% y falta de asignaturas en su formación que propicien la iniciativa ante situaciones complejas con un 58%. Junto con ello, destaca un regular conocimiento de las labores efectuadas en su trabajo, ello queda manifestado en la Figura 1. Un 44% de los entes empleadores encuestados sostienen que el conocimiento es regular, seguido de un 38% que lo considera bueno, le sigue con un 13% deficiente y finamente con un 5% está lo opción excelente.

Figura 1: Nivel de conocimiento labores en su trabajo.

Nota: Elaboración propia.

El nivel de conocimiento, evaluado principalmente como regular por los entes empleadores, da cuenta de algunas falencias formativas que presenta el personal técnico en sus lugares de trabajo. Aunque regular es una opción intermedia, permite alertar respecto a los niveles de conocimento entregado en áreas del cuidado y trato a cada paciente.

En relación con las habilidades de liderazgo, señaladas como una característica por los empleadores, la Figura 2 demuestra que la gran mayoria posiciona al personal técnico de la salud por debajo del 50%.

Figura 2: Ubicación habilidades del liderazgo

Nota: Elaboración propia.

En relación con la ubicación de las habilidades del liderazgo, se optó por determinar la capacidad del personal técnico para influir en los grupos anticipándose al futuro y contribuyendo al desarrollo profesional individual. Se presentaron diversos niveles porcentuales en una escala de 0% , 25%, 50%, 75% y 100%. De los resultados, la opción 50% obtiene un 35% de preferencias, un 27% la sitúa en el 25%, posteriormente aparece la opción 75% con un 26% de respuestas. En la penúltima posición, que equivale al 100%, un 8% la consideró una alternativa. Finalmente, para lo opción 0% existe un 4% de respuestas.

A partir de los resultados obtenidos, se puede sostener que el personal técnico no posee altas habilidades de liderzgo, se concentran las respuestas en las opciones 50% y 25%. Factores como bajo nivel educativo y escasas hablidades sociales inciden en que no presenten mayores habilidades de liderazgo en el lugar de trabajo.

Procedimiento cualitativo: La aplicación de grupos focales como herramienta de investigación social

A partir de la utilización de una metodología cualitativa, se realizaron dos grupos focales a sujetos vinculados al área de enfermería durante el mes de agosto del año 2016. Se optó por la técnica de grupo focal, ya que permite captar el sentir de los sujetos en su máxima expresión, y logra explicaciones y autoexplicaciones que surgen al tenor de la conversación sostenida (Hamui-Sutton y Varela-Ruiz, 2013).

El objetivo de la aplicación de grupos focales consistió en explorar motivaciones y experiencias del personal técnico de la salud al momento de enrolarse en el mercado laboral. Para ello, un grupo focal fue aplicado a docentes que ejercen en alguno de los tres establecimientos educacionales, mientras que el otro grupo focal reunió a estudiantado técnico en enfermería con mención en enfermería y adulto mayor. Una vez recogida la información, se procedió a generar un esquema de las categorías que resultaban de mayor relevancia para los objetivos de la investigación, procediendo a analizar los resultados mediante un análisis del discurso. Según Mella (2000), el grupo focal permite “aprender qué materias son más atingentes al grupo. Así, los investigadores científicos tratarán mediante el grupo focal, de generar hipótesis de investigación acerca de nuevas problemáticas” (p. 5). Para ello, se optó por plantear preguntas semiestructuradas.

En términos temporales, se realizaron dos grupos focales. El primero contó con la participación de docentes de los tres establecimientos educacionales que forman parte de la investigación. El segundo contó con la participación de estudiantes con especialidad en enfermería de los tres establecimientos educacionales que forman parte de la investigación. De manera complementaria se realizaron entrevistas en profundidad a estudiantado titulado.

La utilización de la técnica grupo focal transcurrió en un ambiente donde se consideraron los aspectos socioemocionales que emergieron durante la interacción entre los grupos participantes y el equipo de investigación, lo cual supuso un sinfín de significados altamente enriquecedores respecto a los objetivos de la investigación (Buss et al., 2013).

La edad como variable de tensión al momento de insertarse laboralmente

El estudiantado de liceos técnicos alcanza la titulación con un promedio de 17-18 años, edad en la que tentativamente se insertan en el mercado laboral con el objetivo de asumir compromisos de trabajo con la connotación social, cultural y política que involucra un empleo. Para Pineda y Aliño (1999), la adolescencia es una etapa que combina transformaciones psicológicas, biológicas y sociales; genera cambios conductuales, búsqueda de autonomía y curiosidad sexual. El personal docente de liceos técnicos identifica la edad como una problemática compleja, producto de las responsabilidades que asumen sus estudiantes, ello se refleja en el rendimiento académico, deserción y compromisos asumidos con sus familias. Al respecto, una parte del profesorado sostiene:

[El estudiantado] no puede separar efectivamente lo que es lo personal de la labor que ellos están desempeñando, entonces eso los perjudica en su práctica porque traen los problemas del hogar y no son capaces de separarlo. Entonces, yo creo que ese es un elemento también a tomar en cuenta como un déficit de los alumnos, un problema por lo demás por la edad que tienen. (E: 4) 8

Sabemos bastante que son niños o niñas pero están metidos en esto, entonces lamentablemente ellos se han echado encima responsabilidades que no les corresponde, por ejemplo, hay algunos de 16 o 17 años con relaciones de pareja complicadas. (E: 7)

La simbiosis producida entre lo personal y lo profesional conlleva a que el personal docente identifique, en algunos casos, aspectos críticos por parte del estudiantado como rendimiento negativo, desmotivación y escaso compromiso, lo cual impacta directamente en el desempeño académico. A lo anterior, se debe sumar la problemática socioeconómica que envuelve a algunas de las familias de donde proviene el estudiantado. El personal docente considera que la precariedad del hogar se refleja en su desempeño en el aula, al respecto, una docente sostiene: “Tenemos muchos alumnos en nuestro liceo con dificultades económicas, embarazo adolescente, crisis normativas, por lo tanto fortalecer la autoestima de nuestros estudiantes también es elemental porque nosotros antes que estudiantes formamos personas” (E: 1). El contexto social en el cual el estudiantado se desenvuelve, junto con las responsabilidades profesionales que asumen al momento de enrolarse en liceos técnicos, resulta determinante al momento de definir posibilidades de éxito profesional, ello complejiza sus relaciones interpersonales.

El estudiantado y sujetos titulados comparten la opinión del personal docente, y definen la edad de titulación como una barrera al momento de relacionarse con otros grupos profesionales. Al respecto una de las tituladas sostiene: “Yo salí con 18 años y era la más chica del hospital donde trabajaba. Sentía que los pacientes no me trataban bien y me veían como niña, eso me perjudicó más que nada en mi autoestima” (E: 9).

Inserción laboral y competencias técnicas

Dentro de las principales dificultades que identificaron los entes empleadores, personal titulado y estudiantes destaca la falta de profundización en algunas asignaturas y la falta de canales de comunicación con instituciones del Estado. Ambos factores influyen directamente en la inserción laboral del personal técnico.

En relación con las competencias técnicas adquiridas, existen matices respecto al grado de conocimiento del personal técnico. Mientras el personal docente evalúa de correcta manera el manejo de las habilidades técnicas, los sujetos titulados y estudiantes suelen opinar de manera crítica ante la formación obtenida. En tal sentido, uno de los docentes que participó del grupo focal sostiene:

Los chiquillos igual tienen buenas competencias, bastantes competencias pero la diferencia es que la mano de obra es un poco más barata, entonces eso es lo que les gusta a los empleadores, porque no tienen como para costear, los recursos no son tan altos y los sueldos de los chiquillos son más bajos en comparación a otros profesionales. (E: 8)

Las competencias técnicas adquiridas por el estudiantado y evaluadas de correcta manera por el personal docente se ven cuestionadas al momento de enrolarse en el mundo laboral, las causas del cuestionamiento se originan por la opinión de los entes empleadores respecto al personal técnico en comparación con otros grupos profesionales, ello se traduce en un menor salario y un trato desigual respecto a otros.

El personal titulado sostiene que las competencias técnicas adquiridas en su respectiva formación carecen de profundización, lo cual impacta en un desempeño deficiente al momento de ejercer las actividades profesionales. En tal sentido, señalan:

Sinceramente sirve, pero no tanto, porque nosotros estudiamos en el liceo pero ahí nos enseñaron lo básico. Nos enseñaron a tomar la presión, tomar la temperatura, pinchar y sacar sangre pero eso así súper rápido, nunca tampoco tan profundo como para que uno estuviera segura y decidida a ir a pinchar a una persona. (E: 11)

A una compañera que quedó trabajando y ella ahora está estudiando lo mismo [enfermería], le dijeron que le daban trabajo pero que ella tenía que seguir estudiando. A nosotros en nivel medio no nos dan trabajo, porque piensan que no estamos capacitados. (E: 14)

Yo lo veo como en el fondo que se está menoscabando al alumno y se busca que sea simplemente un acompañante. El abuelito está enfermo ¡Ya, entonces contratemos un técnico de Nivel Medio para que vaya a trabajar con él! necesito que alguien me tome la presión ¡Ya, voy a ir a donde un técnico de Nivel Medio! Creo que en ese sentido hay una mirada peyorativa. (E: 2)

Si comparamos los resultados arrojados en el cuestionario aplicado a sujetos empleadores y los comentarios realizados por el personal docente, el panorama resulta relativamente positivo respecto a las competencias técnicas; no obstante, el estudiantado titulado y estudiantes en las carreras señalan que existen profundas falencias en la formación, lo que se agudiza debido a que la profesión demanda una precisión absoluta, ya que, tal como lo sostiene una estudiante: “Aquí uno está trabajando con vidas, si me equivoco puedo matar a alguien. No se trata de hacer un cálculo o escribir un libro, se trata de salvar vidas, a lo mejor por eso una es más exigente” (E: 10)

En relación con las redes que existen entre los liceos que formaron parte del estudio y las instituciones de gobierno como MINSAL (Ministerio de Salud) o MINEDUC, los sujetos participantes del estudio, en su fase cualitativa, sostienen que la comunicación y apoyo no es fluida y siempre eficaz, lo cual genera desinformación, sentimiento de abandono y reducción en la calidad de formación entregada al estudiantado. Según la opinión de grupos titulados, estudiantes y docentes, se carece de espacios e instancias de diálogo con MINEDUC y MINSAL, lo cual impacta negativamente tanto en la educación brindada al estudiantado como, en un futuro cercano, al servicio prestado al público usuario del sistema de salud donde el estudiantado trabajará. En este aspecto, un grupo de docentes sostiene:

Sería fundamental los campos clínicos, entonces ahí debe haber una preocupación estatal por aunar voluntades, tanto del Ministerio de Educación con el Ministerio de Salud, porque eso nos está faltando, buenos centros de práctica, tenemos pero es insuficiente. (E: 1)

Falta un poco más de apoyo por parte del MINEDUC y una relación más cercana con el MINSAL, donde nos puedan apoyar en el tema de las prácticas en la última parte que tenemos con nuestros alumnos, porque lo que es en 3º y 4º estamos apoyados, están los recursos, tenemos los docentes, estamos bien, pero en la última etapa que yo creo es la etapa más importante de hacer su práctica estamos mal. (E: 6)

Para los actores de la educación participantes de la investigación, la falta de espacios para canalizar sugerencias y demandas (Sepúlveda, 2011, 2016) agudiza un panorama que es visualizado como complejo en términos laborales y desregulado respecto a las facilidades para ejercer la especialidad una vez logrado el título (Sevilla et al., 2014). Un paso fundamental para lograr la titulación reside en la realización de la práctica, es en ese instante donde se ponen a prueba los conocimientos adquiridos, y de los tres establecimientos educacionales con lo que se trabajó, dos manifestaban falta de centros de práctica.

La empleabilidad, como resultado de diversos componentes de acervo cultural y social (Suárez, 2016), pone de manifiesto la importancia de la educación para alcanzar los resultados esperados. La Figura 3 exhibe algunos de los conceptos recurrentemente señalados por los sujetos participantes de la investigación.

Figura 3: Síntesis conceptual.

Nota: Elaboración propia.

La especialidad en atención de enfermería, en términos ideales, engloba habilidades del cuidado que son adquiridas durante la formación, dentro de estas existen cinco que sustentan la especialidad, a saber: ética, organización del cuidado, atención a paciente, manejo técnico y habilidades socioemocionales. De las mencionadas, las dos últimas son puestas en tela de juicio por la mayoría de los sujetos entrevistados y encuestados, lo cual obliga a reforzar los contenidos entregados en estas áreas.

Otro aspecto relevante de destacar reside en que la inserción en el mercado laboral está condicionada por el nivel de estudios del personal técnico, lo cual, en la mayoría de los casos, reduce sus éxitos de empleabilidad, y más bien provoca una pérdida de campo laboral que encuentra una posible solución en la continuidad de estudios a nivel universitario.

Las diferencias entre la percepción del personal docente, grupos titulados y estudiantes representan las subjetividades existentes respecto a los criterios de empleabilidad, no obstante, existe congruencia respecto a factores como creciente pérdida de campo laboral y la necesidad de continuar estudios profesionales, puesto que el título de técnico de la salud de nivel medio, actualmente no representa estabilidad económica para los grupos titulados.

Conclusiones

La EMTP chilena atraviesa por un momento de reformulación respecto a la articulación con la sociedad civil y el sistema de salud. Aspectos como vinculación, fortalecimiento de la educación y validación de los estudios obtenidos se tornan altamente significativos para avanzar en un proceso que presenta considerables transformaciones en lo que respecta a los criterios de empleabilidad.

La relación existente entre empleabilidad y competencias técnicas/habilidades socioemocionales estaría dada principalmente por el nivel educacional del personal técnico de la salud de nivel medio. En el caso estudiado, al existir un entorno de carencias económicas que dificulta el aprendizaje del estudiantado, se inhibe su potencial, lo que genera un panorama complejo al momento de buscar empleo. Otro factor se relaciona con el escaso reconocimiento social de la titulación, lo que dificulta el desarrollo profesional e inserción laboral, con las consiguientes situaciones de precariedad en algunos de los grupos titulados de liceos técnicos con especialidad en enfermería.

Una forma de medir y pensar estrategias que permitan el fortalecimiento integral de la EMTP reside en prestar atención a la contingencia de la empleabilidad, por lo cual, conocer los criterios de empleabilidad por parte de un amplio segmento de los actores sociales involucrados resultó altamente significativo, lo que a su vez se torna un síntoma de las diferencias jerárquicas y educativas que conciernen al área de profesionales y personal técnico de la salud en Chile.

Por un lado, a través de la presente investigación se constató que los entes empleadores, docentes, personal titulado y estudiantes consideran diversos factores que influyen en la empleabilidad, entre ellos, y a modo de antecedente, destaca la escasa preparación con el medio intercultural en que se desenvuelven, aspecto que fue detectado principalmente por los entes empleadores. La salud intercultural se torna una herramienta pedagógica sumamente necesaria en el contexto mapuche de la zona, específicamente cuando los protocolos y cosmovisiones muchas veces tensionan el reconocimiento de un modelo tradicional u occidental.

Asimismo, la deficiente comunicación con instituciones gubernamentales revelado por el personal docente y la falta de conocimientos técnicos y socioemocionales manifestado por estudiantes y grupos titulados exacerban negativamente los escenarios de empleabilidad. De momento, no se puede desconocer la existencia de situaciones de conflictivas y complejas que experimentan algunos grupos titulados, la incertidumbre del estudiantado al momento de egresar de enseñanza media y la falta de canales de diálogo entre instancias planificadoras políticas y docentes. Lo anterior refleja cuotas de disconformidad y la percepción de un panorama poco alentador al momento de enrolarse en el mercado laboral. En lo que respecta a los entes empleadores, se puede sostener que existe un grado genérico de aprobación en ámbitos como inserción en el mercado laboral y capacidades técnicas, no obstante, identifican ejes críticos en lo relacionado con aspectos técnicos y socioemocionales.

Por otro lado, utilizar técnicas metodológicas cuantitativas y cualitativas permitió obtener una visión global respecto a los objetivos planteados en la investigación. A su vez, permitió recabar información sumamente necesaria para avanzar en el diagnóstico de fortalezas y debilidades que actualmente condicionan la inserción laboral del personal técnico de nivel medio de la salud titulado de liceos de La Araucanía.

Finalmente, la relación entre educación y salud, como temáticas prioritarias para la sociedad chilena, requiere de mecanismos que modernicen, optimicen y resguarden el desempeño de profesionales del área. Detectar las falencias y virtudes de la EMTP, posibilita avanzar tanto en la calidad de los servicios prestados como en el desarrollo humano y social del país.

Agradecimientos

Agradecemos al Ministerio de Educación de Chile, que mediante el Concurso destinado al Fortalecimiento y Articulación de la Educación Técnico Profesional del año 2015 financió la presente investigación. Este trabajo fue realizado en el marco del proyecto “Técnicos Profesionales de la Salud en Malleco” VICD17PRO02501300002, con la supervisión y colaboración de la Unidad de Investigación, Innovación y Postgrado de la Universidad Arturo Prat.

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1 Chileno. Doctor en Ciencias Sociales por la Universidad Nacional de General Sarmiento e Instituto de Desarrollo Económico y Social. Máster en Dinámicas de Cambio en las Sociedades Modernas Avanzadas por la Universidad Pública de Navarra. Sociólogo.

2 Chilena. Ingeniera Comercial por la Universidad de Concepción. Ha realizado asesorías para corporaciones de La Araucanía y el Ministerio del Interior de Chile. Consultora independiente.

3 Chileno. Estudiante del Magíster en Gestión Pública Municipal y Desarrollo Local (Universidad Autónoma de Chile). Cientista Político por la Universidad Católica de Temuco. Investigador colaborador en el Observatorio de Medios y Movimientos Sociales de la Universidad de la Frontera. Docente DIFEM-UFRO.

4 Una versión preliminar de este trabajo fue presentada en el Noveno Congreso Nacional de Sociología (Chile). Agradecemos los comentarios de Rodrigo Molina y Michael Araya, así como las notables sugerencias de los pares evaluadores de esta revista.

5 Estas son: Forestal, Muebles y Terminaciones en Madera, Agropecuaria, Elaboración Industrial de Alimento, Gastronomía, Construcción, Refrigeración y Climatización, Instalaciones Sanitarias, Montaje Industrial, Mecánica Automotriz, Mecánica Industrial, Construcciones Metálicas, Electricidad, Electrónica, Acuicultura, Pesquería, Tripulación de Naves Mercantes y Especiales, Operaciones Portuarias, Explotación Minera, Metalurgia Extractiva, Asistencia en Geología, Gráfico, Dibujo Técnico, Vestuario y Confección Textil, Administración, Contabilidad, Atención de Párvulos, Atención de Enfermería, Química Industrial, Conectividad y Redes, Telecomunicaciones, Programación, Servicios de Hotelería, Servicios de Turismo.

6 El “situs”, basado en una dimensión horizontal (función básica) y otra vertical (distribución jerárquica de las ocupaciones), refiere a la situación profesional desde una posición de control integral y empoderamiento hacia las labores que competen al grupo de profesionales en áreas sociales, políticas, técnicas y económicas.

7 $250.000 equivale a 421 USD aproximadamente, mientras que $551.000 equivale a 927 USD aproximadamente.

8 La letra “E” corresponde a Entrevistado, mientras que el número representa una asignación de orden dentro del grupo de participantes.


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